La hija del presidente de EE.UU., Ivanka Trump, y su marido, Jared Kushner, viajaron la semana pasada al Club de Golf Nacional Trump en Nueva Jersey para celebrar la Pascua Judía, ignorando las directrices de comportamiento de las autoridades del país que solicitan a la población realizar solo viajes esenciales debido a la pandemia del coronavirus.
Según informó el New York Times, Ivanka, que es una de las encargadas del programa económico diseñado para enfrentarse a la crisis desatada por el virus, se trasladó para la festividad desde Washington hasta Nueva Jersey con su pareja y sus tres hijos.
«Aquellos que tienen la suerte de poder quedarse en casa, por favor, por favor, hacerlo (…) Cada uno de nosotros juega un papel en la ralentización de la propagación», decía hace unos días la hija del mandatario estadounidense en un vídeo publicado en redes sociales.
Ivanka y su esposo, que también es uno de los consejeros más destacados del presidente Donald Trump, ignoraron también la orden emitida en Washington de no salir a la calle a no ser que se trabaje en un servicio considerado esencial.
Este jueves, un representante de la Casa Blanca confirmó que ambos habían pasado la Pascua Judía «en privado» en una «residencia familiar», y señaló que no se trasladaron en un avión comercial, a la vez que subrayó que no hay ningún tipo de prohibición de viaje a nivel nacional.
Sin embargo, la visita a Nueva Jersey se produjo pese a que el gobernador del estado, Phil Murphy, solicitara ya el mes pasado a las personas con segundas residencias en la región que no viajaran ahí para evitar una mayor propagación del virus en la zona, una de las más afectadas por la pandemia en EE.UU.
El viaje de Ivanka Trump y Jared Kushner se conoce tras las fuertes críticas que ha recibido el presidente del país tras haber anunciado que EE.UU. cortaría los fondos destinados a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El propio secretario general de la ONU, António Guterres, ha afirmado en un comunicado que «no es el momento» para tomar esta decisión.
«Una vez hayamos pasado la página de esta epidemia, debe haber un momento para mirar hacia atrás y comprender cómo surgió esta enfermedad y cómo propagó su devastación tan rápidamente en todo el mundo, y cómo todos los involucrados reaccionaron a la crisis», afirmó en un comunicado Guterres.
«Pero ahora -continuó- no es ese momento. Del mismo modo que no es ese momento, tampoco es el momento de reducir los recursos para las operaciones de la Organización Mundial de la Salud o cualquier otra organización humanitaria en la lucha contra el virus».