Malasia ha presentado una protesta ante la ONU contra las ambiciones territoriales de China en el Mar de China Meridional, aguas que el gigante asiático disputa a varios países de la región, según reveló hoy el ministro de Asuntos Exteriores malasio, Hishammuddin Tun Hussein, en sesión parlamentaria.
El Gobierno malasio envió una carta a la ONU hace dos semanas en la que rechazaba las reclamaciones de China en la zona en detrimento de Malasia y otras naciones de la zona, informó el ministro malasio.
«El Gobierno malasio sostiene la opinión de que las reclamaciones de la República Popular de China contra entidades marítimas en el Mar de China Meridional carece de fundamento según la ley internacional», señaló Hussein en un discurso citado por la agencia noticias estatal Bernama.
«En base a esto, Malasia ejercerá sus derechos constantemente, al tiempo que toma una postura precavida para evitar cualquier acción que pueda provocar tensiones o escalar la situación«, añadió el ministro, que además reveló que había tratado el asunto con el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, el miércoles y con el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, el martes.
Las protestas de Malasia se produjeron como reacción a la presencia de un buque de patrulla de la Marina china en las aguas de Luconia, en aguas territoriales malasias, entre el 22 de mayo y el 7 de julio, un asunto que, según Hussein, fue resuelto por vías diplomáticas cuando la embarcación abandonó la zona.
Las ambiciones territoriales de China en las aguas al sur de su territorio -por el que circula el 30% del comercio global y que alberga el 12 % de los caladeros mundiales, además de yacimientos de petróleo y gas– no sólo afectan a Malasia, que tiene al gigante asiático como su mayor socio comerciales, sino también a Filipinas, Vietnam, Brunéi y Taiwán.
En los últimos meses, barcos de la Marina china han hecho incursiones en aguas territoriales de Vietnam y de Filipinas, lo que ha contribuido a tensar las relaciones de China con estos países y con Estados Unidos.
La Corte Permanente de Arbitraje de La Haya atribuyó en 2016 a Filipinas la titularidad en el Mar de China Meridional del atolón Scarborough y parte del archipiélago Spratly, disputados por China, que se niega a reconocer el fallo.