Con los desembarcos de las últimas horas son cerca de 1.400 migrantes los que se encuentran en la isla italiana de Lampedusa, que cuenta con tan sólo un centro de acogida con capacidad para un centenar de personas.

En las últimas horas llegaron a la pequeña isla a pocas millas de las costas del norte de África un total de 276 migrantes que se sumaron a los 250 que llegaron este jueves en seis barcazas.

Los botes fueron, en su mayor parte, rescatados por las lanchas de la Capitanía del Puerto y la policía Financiera, pero otra barcaza con 10 persona llegaron de manera autónoma al muelle y 72 fueron localizados por los Carabineros después de desembarca en una de las playas.Italia

La situación en Lampedusa, considerada la puerta de Europa para los muchos que escapan de la pobreza, las guerras y la carestía, es difícil ya que sólo cuenta con un centro de acogida y con la Casa de la Fraternidad, el recinto parroquial gestionado por el párroco Carmelo La Magra.

En los días pasados, centenares de migrantes llegados a la isla han sido trasladados a otras localidades de Sicilia, mientras que los dos barcos de pasajeros que fueron puestos a disposición del Gobierno para que pasasen la cuarentena debido a la pandemia están llenos, con cerca un millar de personas cada uno.

El alcalde de Trapani, en Sicilia, Giacomo Tranchida, prohibió además la llegada este jueves de 250 migrantes que habían sido trasladados desde Lampedusa al considerar que la solución al problema migratorio no era llevarlos desde la isla a su localidad.

En los desembarcos nocturnos llegaron 6 tunecinos y otros procedentes de Libia y de países subsaharianos.

Según las cifras oficiales, en lo que va de 2020 las llegadas de inmigrantes por mar ascienden a 15.000, casi cuatro veces más que el año pasado. De ellos, los tunecinos son la nacionalidad más representada, con 6.500 desembarcados.