Laura, degradada a depresión tropical después de haber tocado tierra en Luisiana, Estados Unidos, el miércoles como un potente huracán de categoría 4, cruzó Arkansas este viernes y enfiló hacia el sureste de Missouri, todavía con vientos y lluvias capaces de hacer daño.
El Centro de Predicción Meteorológica de Estados Unidos indicó que la depresión se mueve hacia el este-noreste a cerca de 20 kilómetros por hora con vientos máximos sostenidos de 45 km/h.
El viento se mantendrá así a lo largo del día, pero se espera un fortalecimiento, acompañado de un aumento de la velocidad de traslación, el sábado y el domingo a medida que la depresión se desplace hacia el Atlántico.
Estados como Nueva York y Massachusets están en los mapas de lluvias de Laura realizados por el Centro de Predicción Meteorológica de Estados Unidos.
La depresión estaba esta mañana a 155 kilómetros m al oeste-noroeste de Memphis, Tennessee, y a 280 kilómetros al oeste-sureste de Paducah, en Kentucky.
No hay advertencias ni avisos de vigilancia para zonas costeras, pero en el noreste de la costa del Golfo de México todavía se siente el oleaje y las corrientes ocasionadas por el paso de Laura, que entró al golfo desde el Caribe a comienzos de la semana.
Las lluvias causadas por Laura van a afectar áreas de Luisiana, Arkansas, Misisipi, Alabama, Tennessee, Missouri, Kentucky y existe riesgo de inundaciones repentinas y urbanas y de desbordamiento de ríos en algunos lugares.
Hay también algún riesgo de tornados en Tennessee.
Al menos seis personas murieron en Luisiana a causa de la situación creada por Laura, a las que hay que sumar las más de 10 fallecidas en el Caribe cuando paso sobre varia islas antes de entrar al Golfo de México y transformarse en el mayor huracán de lo que va de 2020.
Los daños materiales causados por Laura aun están por cuantificar, pero las imágenes de la zona donde impactó muestran que fueron importantes.
Incluso en Arkansas ha causado daños y destrucción en viviendas, según muestran las fotografías publicadas este viernes.