El descubrimiento del gas fosfano en la atmósfera de Venus indica que ese planeta tiene el «potencial» de albergar o haber albergado vida, según un estudio publicado hoy en Nature Astronomy.

Según el equipo de la Universidad de Cardiff a cargo de la investigación, el descubrimiento «sugiere que Venus podría acoger procesos fotoquímicos o geoquímicos«, aunque no implica necesariamente «una evidencia robusta de vida microbiana» en el planeta.

Las observaciones del telescopio James Clerk Maxwell y del Gran telescopio Milímetro/Submilímetro en el desierto de Atacama, Chile, en 2017 y 2019 han permitido a los científicos este hallazgo, que abre una senda en la posibilidad de encontrar vida fuera del planeta Tierra.