El diputado federal del Partido Morena, Alejandro Carvajal Hidalgo, afirmó que con la Reforma al Sistema de Pensiones que envió el presidente Andrés Manuel López Obrador a San Lázaro, «se pondrá fin a una de las herencias más terribles del neoliberalismo«, que lo único que ocasionó fue un sistema que no generaba pensionados, sino desprotegidos, pues más de 60 por ciento de los trabajadores no alcanzarían a tener una pensión.

Los esquemas de pensiones en México y sus costos son uno de los principales problemas en el país, ya que comprometen la factibilidad financiera del Estado, al tiempo de ser un problema social que se manifestará sobre todo a partir del 2021, cuando la primera generación conocida como Afore cumplan las condiciones para poder pensionarse y se tope con la realidad de que no tienen una pensión que les garantice un ingreso”, señaló.

Carvajal Hidalgo indicó que año con año aumenta el número de pensionados, los cuales el gobierno federal tendrá que financiar por lo menos hasta 2080, su gasto creciente limita la inversión en otros rubros esenciales para el desarrollo del país, como la salud, educación, la infraestructura, la tecnología, entre otros, y en virtud de ello “las pensiones de los derechohabientes del IMSS en 2017 fueron de 1.5 por ciento del PIB, y se proyecta que lleguen a 2.25% en 2040«.

Agregó que los recursos del presupuesto federal destinado al pago de pensiones y jubilaciones representaron el 2.06 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de 2008 y el 3.5% de 2018. Cifras que aumentarán para el año 2023, equivalente a 4.1% del PIB, ya que, para ese entonces, la población adulta de 60 años o más representará el 12.28% de la población.

El integrante de la Comisión de Seguridad Social en San Lázaro reconoció que es una realidad que no existe, ni existirá un respaldo financiero creado que permita hacer frente a las pensiones otorgadas conforme a la Ley del Seguro Social de 1973, mucho menos a aquellas que se jubilaran con la Ley de 1997.

Es por ello, que puntualizó que con los cambios planteados en la reforma del presidente López Obrador, a discutirse en el Congreso de la Unión, se propone reducir de mil 250 a 750 semanas el requisito para alcanzar una pensión garantizada, mismas que se incrementarán con el paso de los años hasta las mil semanas en 2031.

Para todos aquellos trabajadores que se inscribieron en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) con la Ley de julio de 1997, se pasaría de 1250 a 750 semanas de cotización, es decir de 23 a 15 años para poder jubilarse”, detalló.

Carvajal Hidalgo explicó que para poder reducir el número de semanas de cotización, se aumentarán las aportaciones de 6.5 a 15 por ciento, siendo la patronal la que absorba el incremento al pasar de 5.15% a 13.87%; y el gobierno seguirá contribuyendo con los mismos recursos que cada año se aprueban en el Presupuesto de Egresos de la Federación.

Además, destacó la pensión garantizada aumentará su cobertura de 34 a 82 por ciento de los trabajadores; es decir, la reforma incrementará a más del doble para que los trabajadores alcancen dicho beneficio.

Indicó, que la iniciativa también incluye que las comisiones cobradas por las Afores se irán reduciendo de forma gradual, ya que estas obtienen una gran cantidad de dinero administrando el recurso de los trabajadores.

Es una reforma histórica, del gobierno, de los empresarios y los trabajadores para que en un futuro cercano todos los mexicanos obtengan una pensión digna”, enfatizó.