Autoridades se alistan para recibir la primera caravana migrante durante la pandemia de covid-19 con un reforzamiento de la seguridad fronteriza y sanitaria ante una nueva caravana de 2 mil migrantes centroamericanos, en su mayoría hondureños, que buscan cruzar el país con rumbo a Estados Unidos.

Agentes fronterizos y de la Guardia Nacional se han apostado a las orillas del río Suchiate, frontera natural con Guatemala, en espera de los migrantes que el pasado miércoles partieron de San Pedro Sula, Honduras, luego de dos semanas de que fue reabierta la frontera en Guatemala.

El despliegue (de fuerzas de seguridad) no sólo se ha dado en México, sino se ha dado desde Centroamérica y al final, sí ha amagado de alguna forma la caravana”, explicó la especialista en temas de migración, Eunice Rendón.

Dijo que ayer por la noche, al interior de la caravana, se dijo que muchas personas se iban a regresar a Honduras «debido a las amenazas que han visto en el camino«. Por ejemplo, la policía tenía orden de detenerlos desde Guatemala.

Dijo que la pandemia de covid-19 y la política antiinmigrante y racista del magnate de Estados Unidos, Donald Trump, quien dio positivo por el patógeno, ha provocado que ahora «haya tres o cuatro muros» desde Centroamérica, El Salvador, Guatemala y México “y la pandemia es el pretexto perfecto para evitar la migración”.

Explicó que la necesidad de estas personas sigue «y mucha gente se pregunta ¿por qué alguien saldría de su país en plena pandemia y se arriesgaría a contraer el virus?«.

«Pero cuando vemos las cifras de homicidios, la violencia y las amenazas que sufren en su país podemos entender que al tener el riesgo inminente y diario, hasta de perder la vida, prefieren tomar el riesgo de contagiarse e intentar llegar a Estados Unidos o a México«, añadió.

Este sábado, fuentes oficiales del Gobierno guatemalteco indicaron que 2 mil migrantes hondureños han retornado voluntariamente a su país, procedentes de Guatemala, tras abdicar en sus intenciones de llegar a Estados Unidos en busca del llamado sueño americano.

Intensifican detenciones

En México, en las últimas horas, los agentes han intensificado las detenciones de migrantes, sobre todo guatemaltecos que no cuentan con documentos que les permitan entrar de manera legal en el país.

Los funcionarios federales se han distribuido en la línea fronteriza de México con Guatemala para impedir el ingreso masivo de los migrantes hondureños que viajan por Guatemala con la idea de llegar a la Unión Americana.

En Ciudad Hidalgo, este sábado en los pasos informales como El Coyote, El Armadillo, Paso Limón y El Cascajo, se les ordena hacer alto a los migrantes para verificar que porten sus documentos oficiales que les permitan ingresar a México.

Las autoridades también han reforzado los operativos para evitar el ingreso de los migrantes por del puente Internacional “Rodolfo Robles”.

Discriminación

Según activistas, entre la población local se ha corrido información falsa de que los migrantes «vienen contaminados de covid-19» lo que ha generado rechazo y discriminación.

Hasta el mediodía de este sábado habían sido detenidos más de una veintena de migrantes guatemaltecos que estaban entrando de manera regular a México, que posteriormente fueron trasladados a la estación migratoria Siglo 21 para definir su estatus migratorio en el país.

El viernes, en México se inicio el reforzamiento de la frontera sur con el despliegue de cientos de agentes de migración, la Guardia Nacional y las Fuerzas Armadas.

El Instituto Nacional de Migración (INM) indicó que los agentes se instalaron en los puntos fronterizos de Ciudad Hidalgo y Tenosique, en los estados de Chiapas y Tabasco.

Un día antes, el Inami confirmó que toda persona que utilice sus instalaciones y las áreas de ingreso en el país deberá cumplir con los protocolos de salud ya que los códigos penales federales y de los estados de Chiapas y de Tabasco, prevén penas de 5 a 10 años de prisión a quien ponga en peligro de contagio la salud de otro.