El peligroso huracán Delta se desplaza este jueves por el Golfo de México en su camino hacia la costa sur estadounidense, a donde llegará el viernes tras haber impactado en la península de Yucatán (México), donde causó inundaciones y daños económicos.

A las 24.00 horas GMT Delta, con vientos máximos sostenidos de 155 millas por hora (185 km/h), que le confieren categoría 3 en la escala Saffir-Simpson de un total de 5, se encontraba a 310 millas (500 km) al sur de Cameron (Luisiana).

El huracán, que podría incluso ganar más potencia antes de llegar a EE.UU., se mueve a 12 millas por hora (19 km/h) hacia el noroeste y va a mantener ese rumbo hasta la noche, cuando girará hacia el norte, y a partir del viernes por la noche hacia el noreste.

La zona del impacto, de acuerdo con los avisos del NHC, abarca desde Sabine Pass hasta Morgan City, en la costa de Luisiana, pero también están en vigor advertencias para zonas costeras de Texas y Mississipi.

Las autoridades han instado a la población de la zona a prepararse y buscar refugio en lugares seguros, y el gobernador de Luisiana, John Bel Edwards, declaró el estado de emergencia el martes.

Según el portal Accuweather, va a ser la primera vez en la historia que un huracán con nombre de letra del alfabeto griego -se usan cuando se acaba la lista de nombres anual- toque tierra en territorio estadounidense.

En esta muy activa temporada ciclónica en el Atlántico han sido diez las tormentas con nombre que han tocado tierra en territorio continental de EE.UU., según ese medio.

Los vientos con fuerza de huracán de Delta se extienden hasta 35 millas (55 km) del centro y los de tormenta tropical (más débiles) hasta 125 millas (205 km).

El mayor peligro de Delta para la costa es el aumento del nivel del mar a causa de la combinación de la marejada ciclónica y la marea, que puede alcanzar un máximo de 11 pies (3,3 metros) en algún punto de Luisiana.

Pero, además, Delta descargará copiosas lluvias que pueden llevar a inundaciones repentinas y desbordes de ríos, propiciar la formación de tornados en Luisiana y Mississipi, y producir un fuerte oleaje en la parte norte y oeste del Golfo de México.