La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, no pudo evitar las lágrimas al disculparse públicamente este jueves por la gestión de la crisis sanitaria de covid-19 que llevó a su gobierno a sacrificar millones de visones de criaderos.

De visita en una granja de cría de visones en la municipalidad de Kolding, la gobernante reconoció los errores cometidos al sacrificar a animales que estaban sanos, algo que el ejecutivo no tenía legalmente derecho a hacer.

«No tengo el menor problema en disculparme por el curso que tomaron los acontecimientos, puesto que se cometieron errores«, declaró Frederiksen a la cadena TV2.

Entre lágrimas, la primera ministra dejó en claro que la culpa no corresponde a los criadores.

«Es a causa del coronavirus, y espero que pueda haber una pequeña luz al final del túnel para los criadores de visones daneses en estos momentos«, agregó.

A comienzos de noviembre, Dinamarca, el mayor exportador mundial de pieles de estos mamíferos, anunció que se sacrificaría a los más de 15 millones de visones que había en el país tras descubrirse que una mutación del coronavirus en estos podría poner en peligro la eficacia de futuras vacunas.

No obstante, días después, el gobierno tuvo que reconocer que no contaba con una base legal suficiente para ordenar esta medida.

Por ello, el ministro de Agricultura, Mogens Jensen, se disculpó y renunció la semana pasada.