Legisladores de la oposición encabezada por el PAN, PRI, y Movimiento Ciudadano fustigan fuertemente a la presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Rosario Piedra Ibarra, durante el informe de actividades del organismo que preside correspondiente al 2020, vía telemática ante el Pleno de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión.

La senadora del PAN, Kenia López Rabadán, consideró que México necesita una institución fuerte, independiente, autónoma, con autoridad moral y que no tenga miedo de confrontar al poder. Indicó que, a casi un año de la crisis sanitaria por la pandemia, la CNDH no ha emitido ni una sola recomendación general.

Por su parte, Juvenal Roa Sánchez, diputado federal del PRI, afirmó que la CNDH no ha ofrecido respuestas concretas a las víctimas de violencia de género y feminicidios; además, ha brillado por su ausencia ante la peor crisis sanitaria de la historia. Estimó que consolidar una cultura de respeto a los derechos humanos y garantizar la progresividad, es un reto que demanda la responsabilidad compartida, y un compromiso institucional para señalar los excesos del poder público sin importar la afinidad política.

De Movimiento Ciudadano, la diputada Adriana Gabriela Medina Ortiz, señaló, que la gestión de la CNDH debía ser un referente positivo en el fortalecimiento y protección de los derechos humanos; el cambio de visión de gobierno debe servir para protegerlos, sin importar la tendencia ideológica, la preferencia política, el poder adquisitivo o cualquier otra consideración.

El senador de Morena, Alejandro Armenta Mier, aseguró que hoy a la cabeza de la CNDH hay una mujer que entiende la problemática en carne propia que representa el sentimiento social de quienes son vulnerados por la acción del poder público. “es una auténtica representante de la lucha en defensa de los derechos humanos”.

El diputado del Partido del Trabajo, José Luis Montalvo Luna, destacó la labor de la titular de la CNDH por privilegiar el diálogo y poner en el centro a las víctimas. Reconoció la respuesta de la institución para coadyuvar a atender el incremento de la violencia de género que se acrecentó por la pandemia; atender la problemática de los migrantes y de los menores no acompañados, así como el fortalecimiento de las relaciones de cooperación y colaboración con organismos internacionales regionales.

La titular de la CNDH, María del Rosario Piedra Ibarra, afirmó que hoy se tiene una Comisión Nacional de los Derechos Humanos más autónoma que nunca, no sólo del gobierno, sino de los partidos y los grupos económicos, porque lo que hoy tenemos es una defensoría del pueblo.

Frente a la pandemia de COVID-19, precisó que la CNDH ha defendido a los enfermos y a los trabajadores de la salud; ha emitido informes, pronunciamientos, exhortos y recomendaciones y está en vías de concluir una recomendación general.

El Estado mexicano debe garantizar la protección y el acceso a la salud de todas las personas y estamos vigilantes para que cumplan con sus obligaciones constitucionales, particularmente, en la Campaña Nacional de Vacunación y, si es preciso denunciar, denunciaremos”, añadió.

También, dijo, se ha defendido al pueblo migrante, a los pueblos indígenas y comunidades afrodescendientes; a las mujeres; a las niñas y niños, sobre todo aquellos con cáncer que necesitan medicamentos; se han defendido a las personas con discapacidad, a la comunidad LGBTTTI, a los periodistas y a los defensores de derechos humanos.

  • Piedra Ibarra precisó que este es el momento para reformar las instituciones de fachada y convertirla en una institución que necesita el pueblo. Hoy los recursos de la CNDH se van, aclaró, para privilegiar a la atención de las víctimas, “menos aparato y menos altos sueldos y privilegios”.