La tormenta invernal que ha causado ya varios muertos y ha dejado a millones sin electricidad en Estados Unidos avanza este martes desde el centro y sur del país al noreste, con lo que puede afectar a 200 millones de personas.
Los efectos de la tormenta son más severos en el sur del país, donde las viviendas y edificios comerciales no están preparados para temperaturas muy inferiores a la congelación, y las autoridades de Texas informaron de la muerte de dos personas debido al frío.
Los apagones y las dificultades para transitar por calles y autopistas heladas también han entorpecido la vacunación contra la covid-19.
La tormenta, que también ha obligado a cancelar más de 4.400 vuelos comerciales, ha dejado registros de temperaturas bajas sin precedentes en cientos de lugares de Estados Unidos, y muchas ciudades han tenido las temperaturas más frías en décadas.
Al parecer asociado con el temporal, en Carolina del Norte hubo un tornado que dejó al menos tres muertos más al tocar tierra la pasada madrugada en Ocean Isle Beach, unos 80 kilómetros al sur de Wilmington, donde causó daños «significativos» a medio centenar de casas y dejó a miles de residentes sin electricidad.
Idéntico problema, pero con una magnitud mucho mayor, siguen padeciéndolo en Texas, donde unos 4,3 millones de personas permanecen sin suministro eléctrico desde el lunes, y se han registrado apagones que afectan a más de 100.000 abonados en Oklahoma, Luisiana, Kentucky y Virginia Occidental.
Según PowerOutage.us, una plataforma que reúne datos sobre los cortes en el suministro de energía eléctrica, ha habido también apagones que afectan a más de 50.000 personas en Nuevo México, Misisipi, Alabama, Arkansas, Kansas, Dakota del Sur, Carolina del Norte, Illinois y Ohio.
El Servicio Meteorológico Nacional pronosticó también nieve, heladas y lluvia helada debido a «una tormenta invernal masiva» que cruza el Valle del Ohio hacia el noreste.
«El aire ártico con temperaturas de congelación y peligrosos vendavales fríos persistirá sobre un tercio de la región central durante esta semana», agregó.
En Oklahoma City se registraron 24 grados Celsius bajo cero, lo que supuso la temperatura más fría desde 1889, mientras que los 18 grados bajo cero de Dallas (Texas) fue la más baja desde 1930.
Houston, con 10 grados centígrados bajo cero, y San Antonio, con 11 bajo cero, tuvieron su amanecer más frío desde 1989.
El Louisville (Kentuky), la acumulación de nieve alcanzó entre 8 y 12 centímetros, y en Illinois la nieve caída tuvo un espesor de hasta medio metro en algunos lugares.