El último dirigente de la Unión Soviética, Mijaíl Gorbachov, llamó este sábado a los presidentes de Rusia y Estados Unidos, Vladimir Putin y Joe Biden, a sentarse a la mesa de conversaciones para debatir la reducción de armas nucleares y la seguridad internacional.

«Yo considero que es obligatorio que los presidentes se reúnan. Mi experiencia con (el presidente de Estados Unidos, Ronald) Reagan muestra que antes de las conversaciones era un conservador empedernido, pero al comprender el problema, se tornó un participante activo del proceso de diálogo«, declaró el político ruso en una entrevista a Interfax.

Gorbachov, el primer y último presidente de la URSS que el próximo 2 de marzo cumplirá 90 años, afirmó que la experiencia muestra que «es necesario reunirse y llegar a acuerdos» sin ofenderse con la contraparte.

«Lo importante es evitar la guerra nuclear. Y si hay que evitar este problema, que no se puede resolver en solitario, es necesario reunirse y preocuparse de conjunto al respecto«, añadió.

Porque, según Gorbachov, Rusia y Estados Unidos «tienen una gran experiencia que permite responder la pregunta de ‘hacia dónde y cómo avanzar’«.

«En base a la experiencia del pasado es comprensible que si se impone el deseo de lograr el desarme y el fortalecimiento de la seguridad, entonces se pueden lograr muchas cosas«, dijo.

Las tensiones entre Rusia y Estados Unidos durante la presidencia de Donald Trump se incrementaron, entre otras cosas, por fin del tratado para la eliminación de misiles nucleares de medio y corto alcance (INF) y la retirada estadounidense del Tratado de Cielos Abiertos, acuerdos básicos para la seguridad internacional.

A ello se sumó la falta de avances respecto al tratado de desarme nuclear Nuevo Start, que debía caducar a principios de febrero, situación que salió del punto muerto al asumir Joe Biden la presidencia de Estados Unidos, y promover la prórroga por cinco años de este acuerdo dos días antes de su expiración.

Gorbachov expresó su optimismo respecto a la posibilidad del restablecimiento del diálogo entre Rusia y la Unión Europea, que ha caído a los niveles más bajos de la historia tras la condena al líder opositor ruso, Alexei Navalny.

«No hay que temer a las conversaciones»

«No hay que temer a las conversaciones. Solo las conversaciones, solo los encuentros a todos los niveles, y sobre todo a los mas altos, pueden conducir a resultados positivos. Yo creo en eso. La experiencia da clara fe de ello«, indicó.

El lunes pasado, la UE decidió tomar medidas contra Rusia sobre la base del nuevo régimen de sanciones contra las violaciones de derechos humanos que Bruselas aprobó en diciembre.

El acuerdo llega después de la tensa visita a Moscú del alto representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, tras el cual el exministro español ya abrió la puerta a aprobar sanciones contra Rusia.

La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajarova, consideró dicho acuerdo político de los Veintisiete «una humillación, en primer lugar, de la propia UE«, e indicó que con estas medidas el bloque convierte la defensa de los derechos humanos en un «circo«.