La oposición armenia, reunida este martes en una nueva protesta frente al Parlamento, anunció que bloqueará de forma permanente los accesos al órgano legislativo hasta la renuncia del primer ministro, Nikol Pashinián.
«El primer ministro es un mentiroso y un traidor», dijo Eduard Sharmazanov, del Partido Republicano de Armenia, durante la manifestación, emitida en directo por medios locales.
A su vez, el líder de la oposición armenia, Vazguen Manukián, pidió a los detractores del Gobierno que controlen todos los accesos al Parlamento para que «no pueda entrar ningún diputado».
«Bloquearemos la labor del Legislativo, que trabajará sólo cuando decida abordar temas que benefician a nuestro Estado. Hasta entonces, bloqueen todas las entradas», dijo Manukián ante los seguidores de la oposición.
El Parlamento, controlado por el partido gubernamental Mi Paso, rechazó previamente en varias ocasiones estudiar la posibilidad de una moción de censura al primer ministro, quien llegó al poder en 2018 tras una revolución pacífica en Armenia, pero cayó en desgracia a raíz de la derrota de Armenia el año pasado en la guerra contra Azerbaiyán por el control de Nagorno Karabaj.
La oposición acusa a Pashinián de engañar al pueblo con «mentiras sobre una victoria» cuando el resultado de la guerra fue el contrario.
«Ahora tiene que cargar con 5.000 muertos sobre su conciencia», dijo el portavoz del Partido Republicano, que gobernó en Armenia antes de la llegada de Pashinián al poder pero en las elecciones legislativas de 2018 no superó el umbral necesario para tener representación parlamentaria.
La crisis política que vive Armenia tras la derrota en la guerra de Nagorno Karabaj se agravó a finales de febrero con un enfrentamiento directo entre el jefe del Ejecutivo y el Ejército del país, que también pidió la renuncia de Pashinián.
La inusitada exigencia de la jefatura militar se produjo después que el primer ministro destituyera al número dos del Estado Mayor General, Tigrán Jachatrián, por hacer un comentario burlón sobre una declaraciones de Pashinián en las que dejó por los suelos la eficacia de los misiles balísticos rusos Iskander.
El primer ministro afirmó que durante la reciente guerra en Nagorno Karabaj «los cohetes Iskander no estallaban (al alcanzar el objetivo) o estallaba solo el 10 por ciento de ellos».
Más tarde, después de una conversación telefónica con el presidente de Rusia, Vladímir Putin, Pashinián admitió que había sido mal informado sobre la eficacia de los Iskander.
La oposición armenia anunció este martes que no desea que el Ejército intervenga en los procesos políticos internos aunque apoya su reclamación.
Los detractores de Pashinián afirmaron además que colocarán más tiendas de campaña en las inmediaciones del Parlamento para permanecer allí día y noche hasta la dimisión del primer ministro, que ha propuesto elecciones anticipadas y una reforma constitucional para salir de la crisis.