El Gobierno de Japón decidió hoy que pondrá fin este domingo al estado de emergencia sanitaria por coronavirus vigente en Tokio y alrededores desde inicios de enero, aunque mantendrá ciertas restricciones para evitar otro repunte de los contagios.

El primer ministro nipón, Yoshihide Suga, anunció la decisión este jueves en rueda de prensa, donde también destacó la eficacia de las medidas tomadas para aplanar la tercera y mayor ola de contagios que afrontaba el país desde el pasado noviembre aunque también llamó a «mantenerse alerta» frente al virus.

La emergencia sanitaria permanecía impuesta desde el pasado 7 de enero en Tokio y las colindantes prefecturas de Chiba, Kanagawa y Saitama, que eran las cuatro últimas regiones del país donde esta medida excepcional seguía activa tras haberse levantado progresivamente en otras zonas del país.

La capital y alrededores dejarán de estar bajo emergencia el día 21 de este mes, tal y como había previsto el Ejecutivo tras extender esa medida excepcional en dos ocasiones para la mayor área metropolitana del país.

SIN BAJAR LA GUARDIA

«Nuestra estrategia ha traído grandes resultados», destacó Suga, quien subrayó en concreto la efectividad de las restricciones de horarios de bares y restaurantes, a los que se pedía cerrar a las 20.00 horas.

El estado de emergencia en Japón, que nunca ha implicado el confinamiento obligatorio de la población, también incluía la recomendación a la población de evitar salidas innecesarias, la promoción del teletrabajo y la limitación de aforo en eventos multitudinarios.

Estas medidas han permitido una reducción del número de contagios diarios en Tokio y alrededores del 40 %, desde los cerca de 5.000 que se daban en la zona antes de declararse el estado de emergencia hasta los 700 de las últimas fechas.

Suga, no obstante, señaló que se mantendrán una serie de «medidas preventivas básicas», entre ellas, seguir con la restricción de horarios comerciales de bares y restaurantes, que desde este domingo podrán cerrar a las 21.00.

«Según nuestra experiencia previa, las reuniones de personas comiendo y bebiendo son un factor de riesgo para propagar contagios», dijo Suga, quien también pidió a los ciudadanos abstenerse de celebrar ese tipo de encuentros en grupos de más de 4 personas.

Asimismo, solicitó a los nipones evitar los eventos multitudinarios habituales en Japón con la llegada de la primavera, entre ellas fiestas de graduación de estudiantes, cenas de empresa o reuniones para contemplar el «sakura» (cerezos en flor).

«Hemos visto un ligero incremento en los contagios recientemente. Esto significa que hay áreas con más movimiento de personas, tenemos que mantenernos en guardia porque siempre existe el riesgo de repunte», advirtió Suga.

ACELERAR LA VACUNACIÓN

Las otras medidas clave para evitar una nueva ola de contagios serán «la vigilancia de las nuevas cepas» del coronavirus, reforzar los sistemas de trazabilidad de contagios y «acelerar el plan de vacunación» de la población.

«Necesitamos que la vacuna llegue a todos los ciudadanos de Japón tan pronto como sea posible», afirmó el primer ministro, quien destacó los «progresos» en la primera fase de inoculación, que por ahora solo está dirigida a los profesionales sanitarios, de los cuales se vacunan unos 80.000 por día.

La campaña de vacunación nipona, no obstante, ha experimentado retrasos respecto a lo inicialmente previsto debido a los problemas de suministro de las dosis producidas por Pfizer, que por el momento es la única vacuna autorizada para su uso en Japón.

Japón tiene previsto iniciar la vacunación de mayores de 65 años el 12 de abril, mientras que para junio el país se habrá «asegurado tener» unas 100 millones de dosis, suficientes para abordar la inoculación del grueso de su población ese mismo mes o en julio, cuando está previsto que comiencen los Juegos Olímpicos de Tokio.

Sobre el evento deportivo, Suga recalcó que el Gobierno «está haciendo todo lo posible para ayudar a su preparación», lo que incluye los esfuerzos para frenar los contagios.

Asimismo, señaló que Japón tiene previsto mantener, por el momento, las restricciones fronterizas que desde finales de diciembre impiden la entrada en el país de todos los viajeros que no sean residentes, así como limitar el número diario de los pasajeros que acceden cada día a territorio nipón.

Japón suma hasta la fecha más de 452.000 contagios de coronavirus y 8.739 fallecimientos.