El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, invitó este viernes a una cumbre virtual contra el cambio climático a 40 líderes mundiales, entre los que figuran los mandatarios de China, Xi Jinping, y de Rusia, Vladimir Putin, con los que Washington mantiene una relación tensa.
Según la Casa Blanca, a la reunión, que se celebrará el 22 y 23 de abril, han sido invitados los líderes de 17 países que son responsables del 80% de las emisiones globales, así como los dirigentes de otras naciones que sufren los efectos del cambio climático o que han demostrado voluntad para combatirlo.
La Casa Blanca adelantó además que antes de la cumbre anunciará unos «ambiciosos objetivos» para reducir las emisiones de carbono bajo el paraguas del Acuerdo climático de París, del que EE.UU. salió bajo el Gobierno de Donald Trump y al que Biden se reincorporó en su primer día como presidente.
El objetivo de la cumbre es invitar a otros países a formular sus propios compromisos para reducir los gases de efecto invernadero, indicó la Casa Blanca.
Entre los líderes latinoamericanos invitados figuran los presidentes de Argentina, Alberto Fernández; Colombia, Iván Duque; Brasil, Jair Bolsonaro; Chile, Sebastián Piñera; y México, Andrés Manuel López Obrador.
Otros invitados son el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y el rey de Arabia Saudí, Salman bin Abdulaziz, quien dirige el país con las mayores reservas probadas en el mundo de petróleo.
También se espera que acudan a la reunión la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula Von der Leyen; la canciller alemana, Angela Merkel; el presidente francés, Emmanuel Macron; el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el primer ministro británico, Boris Johnson.
De hecho, Johnson habló por teléfono este mismo viernes con Biden y, de acuerdo a la Casa Blanca, ambos coincidieron en la «importancia de desarrollar objetivos climáticos ambiciosos» aprovechando la cumbre y que el Reino Unido ocupa actualmente la Presidencia rotatoria del G7, los países más industrializados y ricos del mundo.
En declaraciones a la prensa en la Casa Blanca, Biden explicó que el jueves conversó con los miembros de la UE sobre la cumbre e indicó que aún no ha hablado sobre ello con Putin y Xi de manera individual, aunque «ellos saben que están invitados».
EE.UU. espera que la reunión sirva para preparar la Cumbre del Clima de Glasgow (COP26), que debía haberse celebrado a finales de noviembre de 2020, pero que fue pospuesta por la pandemia de coronavirus y está previsto que tenga lugar entre el 1 y el 12 de noviembre de este año.
Antes que Biden, otros presidentes como George W. Bush (2001-2009) y Barack Obama convocaron cumbres similares con jefes de Estado y de Gobierno de todo el mundo para abordar el problema del calentamiento global.
Trump, sin embargo, dejó de organizar esas reuniones y, durante su mandato, rescindió decenas de regulaciones medioambientales y se posicionó siempre del lado del sector de los combustibles fósiles.
Frente a ello, Biden quiere hacer de la crisis climática uno de los ejes centrales de su mandato.
Para ello, creó el puesto de enviado especial del clima de EE.UU., para el que nombró al exsecretario de Estado John Kerry, y además ha prometido que invertirá 1,7 billones de dólares en energías limpias y hará que Estados Unidos reduzca a cero sus emisiones de gases con efecto invernadero para 2050.