La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) informó este martes que investiga el caso de Victoria Esperanza Salazar, una ciudadana salvadoreña que murió al ser sometida por policías municipales de Tulum, Quintana Roo, el sábado pasado.
«La presidenta de la CNDH, Rosario Piedra Ibarra, acordó la radicación de oficio y atracción del caso de una mujer, de nacionalidad salvadoreña, que murió al ser sometida por elementos de la Dirección Municipal de Seguridad Pública de Tulum, Quintana Roo«, indicó la CNDH en un comunicado.
Ello «ante los presuntos hechos violatorios de derechos humanos que fueron difundidos en medios de comunicación en días pasados«, dijo la CNDH, que calificó los hechos de «lamentables«.
Los hechos ocurridos la tarde del sábado anterior ameritaron la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Quintana Roo por probable uso excesivo de la fuerza.
Por estos hechos, la Fiscalía de Quintana Roo inició también una investigación, explicó el boletín.
«La CNDH integrará el expediente de queja respectivo y, en su momento, emitirá el pronunciamiento que conforme a derecho corresponda«, indicó el organismo.
La comisión explicó que atrae el caso porque es un asunto de interés «nacional» y con «la finalidad de investigar posibles actos u omisiones cometidos por parte de servidores públicos del Ayuntamiento de Tulum, Quintana Roo, así como de la Fiscalía General de Justicia de ese estado, que por su naturaleza pudieran resultar de especial gravedad y constituir violaciones a los derechos humanos«.
El acuerdo para atraer el caso ya fue notificado a la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Quintana Roo, a la Fiscalía General de ese estado y la Dirección Municipal de Seguridad Pública en Tulum.
Victoria Esperanza Salazar, de 36 años y residente en México con una visa humanitaria desde 2018, fue sometida por cuatro policías del enclave turístico de Tulum, que ya están procesados por feminicidio.
El deceso de Salazar, grabado en video, motivó protestas de organismo internacionales y grupos que acusan a las fuerzas de seguridad mexicanas de racismo y misoginia, además de reclamos de El Salvador.
Varia agencias de la ONU, como la OIM, Acnur y la ONU-DH, condenaron este martes el asesinato de la mujer y pidieron a las autoridades una investigación «pronta e imparcial«.