El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, sigue vetado por el momento en Facebook, pero la empresa tiene seis meses de margen para revaluar su bloqueo indefinido, según determinó este miércoles el consejo asesor de la compañía, abriendo así la puerta a su regreso a las redes sociales.

Las cuentas de Trump en Facebook e Instagram (propiedad de la compañía) permanecen cerradas desde el asalto al Capitolio del pasado 6 de enero por parte de miles de simpatizantes del exmandatario, algunos de ellos armados, y que se saldó con cinco muertos.

En su decisión publicada este miércoles, el consejo dijo «respaldar» que se bloquearan las cuentas del expresidente porque sus publicaciones durante el ataque al Capitolio «violaron gravemente las reglas» de uso de la red social, pero consideró que la sanción de vetarlo indefinidamente es arbitraria y no adecuada.

«Para que una sanción no sea considerada arbitraria, debe estar contemplada en las reglas internas de Facebook, y (la sanción que se aplicó a Trump) no lo está«, dijo la abogada colombiana Catalina Botero-Marino, una de los 20 integrantes del consejo.

«Facebook tiene que mostrar que sus decisiones no tienen una desviación ideológica o comercial. Por eso es tan importante que aplique reglas preexistentes y que las explique a los usuarios. Para tomar medidas extraordinariamente graves, tiene que demostrar que la gravedad de la conducta lo justifica«, apuntó Botero-Marino.

El consejo asesor, creado por la propia empresa para ejercer como un tribunal sobre qué contenidos deben ser eliminados de la plataforma, está formado por 20 miembros -en su mayoría abogados y activistas por los derechos humanos- y actúa de forma independiente a la compañía.

Trump respondió a la decisión con un comunicado en el que acusó a las empresas de internet de haberle «arrebatado» su libertad de expresión, además de haber causado «bochorno y vergüenza» a Estados Unidos.

El exmandatario añadió en su mensaje que el pueblo estadounidense no permitirá esta situación y consideró que las «corruptas» compañías de las redes sociales deberán pagar un «precio político» por lo que están haciendo con él.

«Y no se les debe volver a permitir que destruyan y diezmen nuestro proceso electoral«, concluyó.

Los miembros del consejo lamentaron que el veto se produjo «sin criterios que puedan ser examinados por usuarios u observadores externos» y, por tanto, pidieron a la compañía «reexaminar» su penalización e imponer otra que se ajuste a la normativa interna de la red social con base en la gravedad de las publicaciones de Trump y a la posibilidad de que se produzcan futuros altercados.

Esta revisión por parte de la empresa debe producirse durante los próximos seis meses, algo que previsiblemente ocurrirá, puesto que Facebook se comprometió, desde el momento mismo de la creación del consejo en 2019, a cumplir con las resoluciones del mismo.

Si tras su revaluación de la sanción, Facebook determina que debe levantar el veto indefinido, Trump podría volver a usar sus cuentas de Facebook e Instagram, aunque por el momento sigue bloqueado en la mayoría del resto de redes sociales como Twitter, Snap y YouTube.