Las autoridades elevaron a doce los muertos, incluyendo un imán, y a 15 los heridos este viernes en una explosión en una mezquita en la provincia de Kabul, rompiendo la calma del segundo día de tregua en Afganistán entre los talibanes y el gobierno.

«Doce personas que se habían congregado para rezar incluyendo al Mufti Numan, el imán de la mezquita, han muerto y otros 15 han resultado heridos«, dijo el portavoz de la Policía de Kabul, Firdaws Faramarz.

La explosión tuvo lugar en la mezquita Hajji Bakhshi a las 13:30 horas (tiempo local) en el distrito de Shakar-Dara, al norte de la provincia de Kabul, dijo Faramarz.

Previamente, el número de heridos ascendía a 20, pero el portavoz policial indicó que varios de ellos han fallecido a causa de las heridas recibidas en la explosión.

El portavoz afirmó que la Policía está investigando la autoría del ataque, mientras que los heridos han sido evacuados a varios hospitales de la zona.

La explosión tuvo lugar en la segunda jornada de un alto el fuego de tres días, anunciado por los talibanes el pasado lunes con motivo de las celebraciones por el fin del Ramadán y secundado por el gobierno afgano.

Esta tregua, la cuarta en dos décadas de conflicto, llega en un momento de especial tensión en Afganistán por el comienzo el pasado 1 de mayo de la retirada final de las tropas estadounidenses y de la OTAN comenzaron.

Este proceso finalizará el próximo 11 de septiembre con motivo del vigésimo aniversario de los atentados en Estados Unidos, que desencadenaron la ocupación de Afganistán.

La retirada de 2 mil 500 fuerzas estadounidenses y unas 7 mil fuerzas de la OTAN se produce en un contexto de incremento de la violencia en Afganistán, con una gran ofensiva de los talibanes en varias provincias del país y combates que han dejando solo en las últimas dos semanas al menos mil 500 insurgentes muertos, mientras el gobierno no ha revelado las bajas entre las fuerzas de seguridad afganas.

El jueves, con motivo del primer día de la tregua, el presidente afgano, Ashraf Ghani, aprovechó para llamar a la formación insurgente a proclamar un alto el fuego permanente y volver a las estancadas negociaciones de paz en curso en Doha, Qatar, desde el pasado septiembre.