Bélgica, con las dudas ilustres de Kevin De Bruyne y Eden Hazard, tocados, e Italia, pendiente del capitán Giorgio Chiellini, se verán las caras este viernes en Múnich en los cuartos de final de la Eurocopa, en el encuentro más destacado de esta ronda cuyo premio es la «final a cuatro» de Wembley.

Tanto Bélgica como Italia acabaron su camino en la Eurocopa de 2016 en los cuartos de final, respectivamente ante Gales y Alemania, e intentarán derrumbar el muro de esta ronda este año en Múnich, en una cita en la que la presencia o ausencia de De Bruyne y Eden Hazard puede revolucionar los equilibrios.

La selección de Bélgica, tercera en el Mundial de Rusia 2018, no sabe si podrá contar con sus dos grandes referencias en la creación del juego ofensivo, Eden Hazard y Kevin de Bruyne. Ambos llegaron tocados al torneo y se retiraron lesionados en la batalla contra Portugal en octavos del lunes.

El seleccionador de los Diablos Rojos, el español Roberto Martínez, dijo tras un primer análisis médico que no tienen nada grave, pero que eran duda contra Italia y les dio «un cincuenta por ciento» de posibilidades de recuperarse a tiempo para el viernes, aunque parece difícil que estén en el once titular.

  • Ninguno de los dos pudo entrenar este jueves en la última sesión dirigida por Martínez en Bélgica antes de viajar a Múnich.