El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, pidió hoy a las farmacéuticas que han desarrollado vacunas anticovid con la nueva tecnología de ARN mensajero o ARNm, Moderna y el consorcio Pfizer-BioNTech, que compartan este conocimiento.
«Les urjo a que lo hagan para que podamos acelerar el desarrollo de nueva producción y construir lo antes posible más centros de fabricación de vacunas que aceleren la fabricación mundial de dosis«, señaló en rueda de prensa Tedros, una semana después de que se anunciara la creación de uno de estos centros en Sudáfrica.
Instalaciones similares a la sudafricana están preparándose en otros países, «pero esto se puede acelerar si las compañías comparten abiertamente esta tecnología», señaló, dirigiéndose expresamente a Moderna y Pfizer-BioNTech.
El máximo responsable de la OMS reiteró su esperanza de que a mediados de 2022 se haya conseguido vacunar al 70 % de la población mundial, porcentaje con el que se calcula que se podría conseguir la inmunidad de grupo global frente a la COVID-19.
«Es la mejor forma de frenar la pandemia, salvar vidas, conseguir una recuperación económica verdaderamente global y evitar los peligros que puede entrañar el surgimiento de nuevas variantes del coronavirus», aseguró.
Un objetivo intermedio, también expresado por Tedros con anterioridad, es el de lograr en septiembre de este año que al menos un 10 % de la población de todos los países esté vacunada contra la COVID-19, lo que cubriría como mínimo los grupos de mayor riesgo (trabajadores sanitarios, tercera edad, enfermos crónicos, etc).
«Ello pondrá fin efectivo a la etapa más aguda de la pandemia y salvaría muchas vidas», subrayó Tedros en rueda de prensa, en la que anunció que ya se han administrado en el mundo más de 3.000 millones de dosis (para lograr la inmunidad de grupo harían falta al menos 10.000 millones).