Estar en la primera línea del combate contra el covid-19 como enfermero no fue suficiente para detener la salvaje agresión contra Daniel Porro, quien fue atacado salvajemente por un grupo de vecinos en Neuquén, Argentina, que, además de golpearlo, prendieron fuego su casa y robaron su automóvil por el simple hecho de haberse contagiado de covid-19. Y más de un año después, falleció.
“Nunca se pudo recuperar de aquel rechazo social”, aseguró Miguel Porro, padre del enfermero a LM Neuquén.
“En realidad, desde aquel día, no pudo volver a dormir bien. Trabajaba durante el día y, a la noche, se acostaba pero no podía conciliar el sueño. Sufrió mucho e iba a laburar casi sin dormir”, agregó.
El hombre indicó que la terrible situación que vivió su hijo lo acompañó durante el último año hasta que su cuerpo “no aguantó” más y murió de un paro cardíaco.
“Fueron días duros”, manifestó Miguel tras remarcar que, además del ataque de los vecinos, Daniel tuvo que soportar otras penurias porque en el trabajo “le soltaron la mano” y lo echaron.
Y aunque con el tiempo consiguió un nuevo puesto en otro centro de salud, no pudo olvidar el traumático incidente que había sufrido.
El pasado 4 de julio, Daniel fue a la casa de su madre para dormir y se acostó a descansar, pero en mitad de la noche su corazón se detuvo.
“Uno de sus hermanos pasó por la habitación y ya estaba muerto”, contó su papá, conmocionado.
Las amenazas contra Daniel empezaron a mediados de junio de 2020, cuando debió ser aislado por haberse contagiado de covid-19. Al principio, estuvo encerrado en su casa, y luego fue trasladado al hospital Bouquet Roldán, donde lo dieron de alta a los 14 días con hisopado negativo.
Pero los agravios apenas estaban por llegar.
“Me decían que me vaya del barrio porque tenía coronavirus. No solo no tengo porque cumplí con el aislamiento, sino que me quemaron la casa y me robaron el auto”, dijo en su momento.
”Andate porque sos un caso positivo y te vamos a quemar la casa. No queremos gente como vos acá en el barrio”, le increpó un vecino.
“Me golpearon por todos lados entre varias personas y todavía no me recupero. Perdí el conocimiento y quedé en el hospital. Me llevaron el auto, directamente me lo robaron y una vez que estaba en el hospital me prendieron fuego adentro de mi casa”.
Con información de La Nación y El Universal