El trabajo de arqueólogos llevó al descubrimiento de una fosa común en la región de Pomerania, en Polonia, conocida como el «Valle de la Muerte«, que ha dejado al descubierto los crímenes de los guardias nazis durante la Segunda Guerra Mundial.

Según el estudio publicado en la revista Antiquity, la excavación, realizada el año pasado en la zona norte de Polonia, revela más datos del «Valle», donde se estima que entre 30 mil y 35 mil ciudadanos polacos fueron ejecutados por los nazis a finales de 1939.

En 1945, los alemanes regresaron para matar a más personas y ocultar las pruebas de masacres anteriores, exhumando y quemando los cuerpos.

Pese a los esfuerzos de los oficiales nazis, el equipo de arqueólogos encontró restos de al menos 500 personas en la fosa común.

Además de unos 300 objetos como balas, joyas, anillos y demás que probablemente eran de las personas asesinadas.

También se encontró evidencia de que huesos humanos cremados parecían haber sido esparcidos por la superficie.

Este descubrimiento de la fosa común, fue el resultado de investigaciones arqueológicas, examinación de archivos y entrevistas a los ciudadanos.

De acuerdo con la información, los crímenes provocados en Pomerania en 1939 fue una de las grandes atrocidades de la Segunda Guerra Mundial en Polonia.

Incluso algunos aseguran que fue un preludio a los crímenes posteriores que realizaron los nazis durante el Holocausto.

Se sabía comúnmente que no todas las fosas comunes de 1939 fueron encontradas y exhumadas, y la tumba de los muertos de 1945 tampoco fue exhumada”, señaló el autor David Kobialka.

La investigación de los arqueólogos sobre la fosa común en el ‘Valle de la Muerte’, arrojó que la mayoría de los asesinados eran de la resistencia polaca.

Se espera que pronto se puedan identificar a más víctimas de los nazis en Polonia durante la masacre de Pomerania en 1939 con muestras de ADN.