Un total de 18 estudiantes y miembros del personal de la Escuela de Agricultura y Ciencias Animales de la localidad de Bakura, en el estado de Zamfara, noroeste de Nigeria, que habían sido secuestrados el pasado día 15 por hombres armados, han sido rescatados, según informó hoy la Policía.

«El comando de la Policía del estado de Zamfara, en colaboración con el Gobierno del estado y otras partes interesadas, ha logrado liberar a 18 estudiantes y personal de la Escuela de Agricultura y Ciencias Animales de Zamfara, en Bakura», confirmó en un comunicado el portavoz de la Policía del estado de Zamfara, Shehu Mohammed.

El 15 de agosto, hombres armados atacaron la escuela a medianoche y raptaron a 15 estudiantes y cuatro trabajadores del centro, según las informaciones que dio la Policía al confirmar el incidente.

Tres de los trabajadores fueron rescatados poco después, pero durante el incidente murieron tres personas, un agente y dos vigilantes.

Este viernes también se anunció la liberación de 90 estudiantes que habían secuestrado hombres armados el pasado 30 de mayo en la Escuela Islámica Salihu Tanko de la localidad de Tegina, en el estado de Níger, situado en el centro-norte de Nigeria.

«Los 90 estudiantes han sido liberados. Han sido devueltos la pasada noche y fueron recibidos por el gobierno del estado (de Níger) con sus padres», declaró por teléfono a Efe Mary Noel-Berje, jefa de prensa del gobernador de Níger, Abubakar Sani Bello.

El secuestro tuvo lugar el 30 de mayo, cuando hombres armados atacaron la Escuela Islámica Salihu Tanko de la localidad de Tegina.

En aquel momento, las autoridades no pudieron determinar el número exacto de alumnos secuestrados y pocos días después afirmaron que habían sido 136 los raptados.

Noel-Berje aclaró hoy a Efe que en realidad fueron 93 los niños secuestrados en la escuela y que, entre ellos, dos no eran alumnos de ese centro educativo.

«Uno de los estudiantes secuestrados murió, así que tenemos 90 con nosotros. No acertamos con la cifra al principio», reconoció la jefa de prensa del gobernador, al describir el secuestro como un «incidente desafortunado» y señalar que el gobierno estatal está comprometido a proteger a los niños en las escuelas.

La ola de raptos masivos se viene dando en los últimos meses en el centro-norte y el noroeste de Nigeria por parte de bandas de hombres armados (identificados en el país como «bandidos») implicados en el robo de ganado y en secuestros con el objetivo de obtener lucrativos rescates.

El blanco más habitual de los atacantes son los centros educativos: de acuerdo a datos de la Agencia de la ONU para la Infancia (Unicef), al menos 950 alumnos fueron raptados entre diciembre y principios de julio pasado en esta clase de incidentes.

Además del rapto de estas 18 personas ya liberadas, tan solo este mes de agosto en el estado de Zamfara fueron secuestradas al menos 50 personas el pasado día 22 y unas 60 personas el día 20.

El pasado 12 de junio, el presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari, prometió poner fin a esos sucesos y expresó su «pésame» a las familias de las víctimas de la violencia cometida por bandidos en el noroeste y centro del país.