La céntrica plaza del Zócalo de la Ciudad de México se convirtió este sábado durante unas horas en una pista del ancestral juego de pelota mesoamericano como parte de los festejos de conmemoración de los 500 años de la caída de la ciudad mexica de Tenochtitlan.
El Gobierno capitalino, que ha rebautizado la conquista española como «la resistencia indígena«, organizó una representación escénica de este deporte, conocido como ‘tlachtli’ en idioma náhuatl, para honrar la cultura de los mexicas o aztecas.
El juego de pelota, que se practicaba en varias zonas de Mesoamérica con distintas versiones, tenía como objetivo resolver todo tipo de conflictos como pleitos de tierras, tributos o asuntos comerciales.
La pista instalada en el Zócalo consiste en un muro pintado con la figura de la Serpiente Emplumada o Quetzalcóatl, una de las mayores deidades de los mexicas, con un aro a través del que los competidores tienen que introducir la pelota.
- El evento intentó cumplir toda la cosmovisión alrededor del juego de pelota, incluyendo la petición de permiso a los cuatro puntos cardinales, danzas prehispánicas, el sonido al soplar una caracola, la purificación de los jugadores y la escenificación del sacrificio de los vencidos.