Después de que Lía Limón, alcaldesa electa en Álvaro Obregón, fue agredida a las afueras del Congreso de la capital por policías capitalinos que se encontraban resguardando el recinto.
El Partido Acción Nacional en la Ciudad de México (PAN) condenó la agresión de que fueron objeto los alcaldes de oposición que acudieron al Congreso Local para buscar diálogo con el poder legislativo, debido al «intento de Morena de aprobar leyes que quitan facultades a las Alcaldías, sobre todo en materia de seguridad», señaló el instituto político en un comunicado.
«Exigimos la respuesta inmediata de la Jefa de Gobierno de la Ciudad, Claudia Sheinbaum y del aún Secretario de Gobierno, Martí Batres, así como la sanción a las y los responsables de estos lamentables hechos. La violencia siempre será el peor camino para quien se dice ser un gobierno democrático. No es la primera vez que el Gobierno de la Ciudad de México promueve la violencia física ante quienes se manifiestan pacíficamente», señaló el PAN de la CDMX.
Pidió formalmente se establezca las condiciones para sostener un diálogo abierto, honesto y transparente con los alcaldes de oposición, de lo contrario pedirá la salida del Secretario de Gobierno, Martí Batres.
Señaló que la explicación que dio Martí Batres que “bastaba con una llamada” para que pudiera entrar la oposición al congreso es irrisoria, pues entrar a dicho recinto no implicaría que alguien le llamará a otra persona para poder entrar, sino que es un derecho acceder al recinto.
Sobre si se tomarán acciones legales, indicó que todavía no se sabe si se tomarán acciones legales y que ello, se definirá en los próximos días, pero dejó en claro que “esto no se puede quedar aquí”.