El Reino Unido desplegó 31 armas nucleares durante la guerra contra Argentina por el control de las islas Malvinas en 1982, indica un documento gubernamental desclasificado al que ha tenido acceso la web británica de periodismo de investigación Declassified UK.
El texto, recogido en los Archivos Nacionales, precisa por primera vez el número de armas, después de que el Ministerio británico de Defensa admitiera ya en 2003 que su flota en el Atlántico Sur llevaba armamento nuclear, explica en la web el periodista Richard Norton-Taylor, anteriormente de «The Guardian».
El artículo se publica cuando se cumplen 189 años de la ocupación británica de las Islas Malvinas y antes de que el próximo 2 de abril se marque el 40 aniversario de la invasión argentina para reclamar la soberanía, lo que desembocó en la guerra que acabó el 14 de junio de 1982 con la derrota del país americano.
Declassified UK dice que el despliegue del armamento creó tensiones entre los ministerios británicos de Defensa y Exteriores, por temor a que violaran tratados internacionales de no proliferación, y el primero se negó a la petición del Foreign Office de desembarcarlas en la base británica en la Isla de Ascensión.
En lugar de esto, las armas se transfirieron a los barcos más grandes, HMS Hermes y HMS Invincible, donde el príncipe Andrés, hijo de la reina Isabel, sirvió como piloto de helicóptero. Para mayo de 1982, el Invencible portaba 12 armas nucleares y Hermes 18, mientras que el buque auxiliar de la flota real tenía una, de acuerdo con el artículo.
Según el documento recogido por Declassified UK, los barcos estuvieron en todo momento dentro de la «zona de exclusión total» impuesta por Gran Bretaña alrededor de las Islas Malvinas, sin que las armas entraran en otras aguas territoriales.
Sin embargo, como apunta el autor de la información, el documento oficial no especifica si algunas de esas cabezas nucleares eran «inertes» y se transportaban para comprobar el desgaste que sufrían y cómo funcionarían si se requiriese su uso.