John Kerry, el enviado especial presidencial para el Clima de Estados Unidos, se reunió pasado el mediodía de este miércoles con el presidente Andrés López en el Palacio Nacional, para, entre otros temas, abordar su iniciativa de reforma constitucional en materia eléctrica.

A las 12:22 horas, fuertemente escoltado, el convoy del exsecretario de Estado de la Unión Americana ingreso al recinto histórico por el acceso de la calle Correo Mayor.

Un «mercado abierto»

Más temprano, al reunirse con el canciller Marcelo Ebrard, Kerry aseguró que su país desea trabajar con México para reforzar y fortalecer la posibilidad de que el mercado eléctrico sea abierto y competitivo.

Esto durante la conferencia de prensa en la que el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, anunció que se daría seguimiento a lo que se convino en la Cumbre de Líderes de América del Norte, sobre acción climática, cambio climático y energía.

Por su parte, el estadounidense reiteró que, como anteriormente había informado la titular de la Secretaría de Energía, Jennifer Granholm, se espera trabajar de cerca con México en materia energética.

Sé que el Presidente ha comenzado a hacer unas reformas que son importantes para él y para su país”, dijo.

Por ello, el funcionario aseguró que se espera apoyar a México durante el periodo de trabajo de dichas reformas “Esperamos poder hacer esto en el momento en que el presidente sigue trabajando en estas reformas” y dijo que Estados Unidos respeta “totalmente la soberanía de México”.

Preocupaciones

Ayer en un comunicado de prensa, la embajada de Estados Unidos en México expresó la preocupación del gobierno de Joe Biden sobre la reforma energética que se discute en México, porque, afirmó, promueve el uso de energía sucia.

El gobierno de los Estados Unidos ha expresado reiteradamente preocupación sobre la propuesta actual del sector energético de México.  Promover el uso de tecnologías más sucias, anticuadas y caras sobre alternativas renovables eficientes, pondría en desventaja tanto a consumidores como a la economía en general.

«Escucharemos los puntos de vista del gobierno mexicano en una gama de asuntos energéticos, mientras consultamos con empresas estadounidenses del sector privado para entender mejor como lograr nuestros objetivos energéticos y climáticos”, difundió la embajada estadounidense.