El presidente Andrés López descartó este miércoles que los planteamientos de la reforma eléctrica contravengan el T-MEC, como algunos de los funcionarios del gobierno estadounidense han afirmado.
Según comentó el mandatario, en la reunión que celebró el pasado 31 de marzo con el enviado del Clima de Estados Unidos, John Kerry, se insinuó la violación del tratado comercial por lo que considera que el vecino del norte se encuentra haciendo cabildeo en contra de su propuesta.
“Estados Unidos ha venido a eso, a plantearnos que no están de acuerdo, incluso a insinuar que se viola el tratado cuando no es cierto”, dijo.
También aseguró que los representantes estadounidenses se reúnen con partidarios de la oposición para hablar sobre el tema.
“Nosotros respetamos a todos, nada más que actuamos con independencia y con soberanía”, subrayó.
La propuesta de producción energética del presidente ha despertado una serie de críticas por parte de empresarios y servidores públicos de los países involucrados en el tratado comercial trilateral.
En el Congreso de Estados Unidos a finales de marzo, 40 legisladores tanto republicanos como demócratas firmaron una carta en la que solicitaron que se convoque a una audiencia y se permita investigar las formas en las que México está incumpliendo sus compromisos en el T-MEC en materia de política energética.
En el documento, el republicano Clay Higgins acusa que el gobierno mexicano “está escalando esfuerzos para excluir a las empresas privadas de su sector energético”.
La representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai y el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar también han manifestado sus preocupaciones respecto a la disminución de la competitividad empresarial que puede derivarse de la aplicación de la reforma eléctrica.
Sin embargo, Obrador ha reiterado que no afectará a las firmas estadounidenses pues se mantendrán los contratos siempre y cuando no se trate de empresas de autoabasto.