Haciendo la señal de la paz con la mano, el presidente Andrés Manuel López Obrador desdeñó la acusación que le hizo la alcaldesa de Cuauhtémoc, Ciudad de México, Sandra Cuevas, de perseguirla políticamente para que sea separada del cargo.
“No… amor y paz”, dijo el mandatario federal al contestar a una pregunta expresa al final de su conferencia mañanera en Palacio Nacional.
El pasado lunes, el Tribunal de Justicia Administrativa de la Ciudad de México notificó a Sandra Cuevas de la sentencia emitida por su primera sala, que ordenó su inhabilitación y destitución por un año de la alcaldía Cuauhtémoc, por abuso de funciones al ordenar el cierre en octubre pasado del deportivo Guelatao.
El deportivo, ubicado en la colonia La Lagunilla, cerró durante 41 días bajo el argumento de que iban a hacerle arreglos y mantenimiento para la seguridad de los usuarios, lo cual fue denunciado ante el Tribunal.
En respuesta, públicamente la alcaldesa opositora, de la coalición “Va por México”, acusó al presidente de la República y la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, de encabezar una persecución política en su contra.
“No les tengo miedo, aquí estoy, y voy a seguir haciendo lo correcto”, dijo el pasado 16 de junio.