El rey Carlos III nuevamente está envuelto en polémica ahora por un platillo culinario francés. El motivo del monarca del Reino Unido asegura es por cuestiones relacionadas con los derechos de los animales. El hijo de la reina Isabel II ha condenado durante mucho tiempo que se sirva el considerado manjar de Francia por un problema ético.
Se trata del foie gras, un producto alimenticio del hígado hipertrofiado (aumento excesivo de un órgano) de un pato o ganso que ha sido especialmente sobrealimentado. Se acuerdo con el portal Animanaturalis, los animales son alimentados con maizena adicionada con grasa porcina, aproximadamente consumen tres kilogramos por día, lo que equivaldría en los humanos a consumir doce kilogramos de fideos por día.
Por lo anterior, el rey Carlos III ordenó a los chefs de Clarence House que no cocinaran dicho platillo mientras él fuera el Príncipe de Gales, misma situación que la ha escalado ahora desde el trono británico. La medida del monarca fue elogiada por el grupo de derechos de los animales, Personas por el Trato Ético de los Animales (Peta).
«Como Príncipe de Gales, el Rey Carlos eliminó el foie gras, un producto despreciable por el cual los patos y los gansos son alimentados a la fuerza hasta que sus hígados se hinchan hasta 10 veces su tamaño natural antes de que los animales sean sacrificados desde sus residencias reales”, indicó la ONG, quien agregó:
«Ahora, Peta ha recibido confirmación de que la política compasiva de Su Majestad se extiende al Palacio de Buckingham y todas las demás residencias reales».