Andrés Manuel López Obrador, pidió este viernes a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) presentar una denuncia para que sean instancias judiciales quienes resuelvan el caso de Yasmín Esquivel, ministra de la Suprema Corte acusada de plagiar su tesis.
“Ojalá y la UNAM presente una denuncia», expresó en su rueda de prensa matutina. «Que hagan valer la autonomía, que no estén haciendo politiquería”, añadió.
López Obrador quien propuso a Esquivel en 2019, explicó que el artículo tercero constitucional da autonomía a la UNAM para presentar una denuncia ante ministerios públicos, una vez que se ha realizado una investigación en esta universidad y se ha encontrado una irregularidad.
“¿Para qué le andan buscando tanto si ya hicieron el procedimiento que corresponde, ya llevaron a cabo una investigación?”, cuestionó López Obrador.
Añadió que, de acuerdo a la Constitución mexicana, “lo que procede es presentar una denuncia, judicializar el caso”, para que el Poder Judicial resuelva si hubo plagio y entonces se ordene a la Secretaría de Educación Pública (SEP) “para cancelar el registro de profesiones”.
“Ese es el procedimiento, para qué le dan tanta vuelta”, insistió.
Sus declaraciones se producen horas antes del mensaje programado del rector de la UNAM, Enrique Graue, tras el escándalo que estalló en diciembre pasado, cuando el medio Latinus expuso el presunto plagio de Esquivel mientras buscaba la presidencia de la Suprema Corte, cargo que ganó la ministra Norma Piña.
La UNAM determinó el 11 de enero que la tesis de licenciatura que entregó en 1987 la ministra del Supremo mexicano Esquivel «es copia sustancial» de un trabajo de titulación de otro alumno, Edgar Ulises Báez, entregado en 1986.
Pero la universidad envió el caso a la SEP, al argumentar que la institución académica contaba con vacíos legales que no le otorgaban facultades para retirar un título de licenciatura.
La SEP reviró que debe ser la UNAM la que pida invalidar el título, porque la Dirección General de Profesiones (DGP) «carece de facultades para intervenir de forma alguna en el asunto».
La ministra Esquivel ha sido controversial por ser esposa de uno de los contratistas predilectos del Gobierno y por votar a favor de temas del actual mandatario, como la consulta para enjuiciar a expresidentes y la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica.
Especialistas han advertido que, si Esquivel perdiera su título, debería abandonar la Suprema Corte por no ser licenciada en derecho, como establece la ley, y esto desataría una crisis de legitimidad de los votos en los que ella participó.