Sujetos armados atacaron al periodista Rubén Darío Cruz y a los dos escoltas que tiene asignados dentro del Mecanismo de Protección a Periodistas del Gobierno cuando salían del periódico donde trabaja en Cancún, según narró este viernes a EFE.

Cruz explicó en una entrevista que al salir del diario, donde cubre la fuente policiaca, se acercó un joven a la puerta de entrada para contarle sobre un vehículo negro sospechoso, por lo que los escoltas optaron por trasladar al reportero a su casa por vías alternas.

“Salimos a toda prisa y nos encontramos el coche negro que nos seguía y doblaba hacia donde nosotros íbamos, pensamos que lo habíamos perdido, pero nos volvió a salir al paso», relató el comunicador.

«Le dimos distancia al coche y doblamos por otra calle y de pronto lo teníamos de frente y ya estaban los tipos abajo del coche, uno se acercaba a nosotros con el arma en la mano”, agregó.

El automóvil donde viajaba el periodista recibió un impacto de bala en el parabrisas del lado del copiloto.

“Fue uno de los escoltas quien dispara al ver que ese tipo se acerca con la pistola en la mano, dispara y es el impacto de salida que tiene el carro, eso fue lo que en realidad sucedió”, recordó el periodista.

Tras el ataque, los escoltas buscaron refugio en la cárcel de Cancún, que se ubica a unas cuantas calles y donde están apostadas varias patrullas.

Cruz está en el Mecanismo Federal de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas desde hace más de dos años tras amenazas y un intento de secuestro en Veracruz, estado del Golfo de México.

Junto con su familia se trasladó a Cancún, pero al poco tiempo de llegar dispararon balazos al aire frente a su casa.

“Estaba tan feliz de que ya iba a poder andar solo con mi esposa en la calle, yo me quería liberar ya de esto, esto no es vida, estar así sinceramente no es vida», expuso el reportero.

«Es lamentable porque no sé si fue una acción fortuita, no sé si fue algo tramado, no te puedo decir, pero el destino nos hizo coincidir con estos canijos (malditos) tres veces”, concluyó.

La Fiscalía General de Quintana Roo anunció en sus redes sociales que inició una carpeta de investigación por la agresión.

Los hechos ocurren mientras México se consolida como el «país en paz» más peligroso para la prensa, al concentrar 20 % de los asesinatos de periodistas del mundo en 2022, con 13, según Reporteros Sin Fronteras.

Mientras que otras asociaciones como la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) contabilizan cerca de 20 asesinatos.