Andrés Manuel López Obrador, confirmó este lunes que envió a un grupo de 150 personas para ayudar a Chile ante los incendios forestales más devastadores que ha sufrido en décadas y que se han cobrado 26 vidas.
“Comentarles que nos pidieron apoyo de Chile, el presidente, porque están siendo afectados en Chile por incendios, más allá de lo normal, están padeciendo de incendios forestales, quema de poblados, incluso también hay personas que han perdido la vida”, refirió el mandatario durante su conferencia de prensa diaria.
López Obrador puntualizó que el domingo salió de México rumbo a Chile un grupo de soldados, “oficiales de la Secretaría de la Defensa y también de la comisión forestal, especialistas en trabajar para apagar incendios, se fueron 150 mexicanos a Chile, ya llegaron (este lunes) a las 4.25 de la mañana”.
Afirmó que esta ayuda la ofrecen “de corazón” a sus “hermanos chilenos”.
La grave ola de incendios en Chile ha causado ya la muerte de 26 personas y ha destruido más de 45.000 hectáreas, principalmente en las regiones de Ñuble, Biobío y La Araucanía, zonas de intensa actividad agrícola y forestal ubicadas 400, 500 y 700 kilómetros al sur de Santiago de Chile, respectivamente.
El Gobierno chileno decretó el Estado de Excepción Constitucional de Catástrofe, que permite entregar ayudas a los afectados de forma más expedita y movilizar recursos, entre otras medidas.
Según el último reporte del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) del Ministerio del Interior, actualmente hay 251 incendios activos en todo el país, de los cuales 80 están en combate.
Los incendios coinciden con una larga sequía que ya dura más de 13 años y con una ola de calor inédita en el sur, con temperaturas que pueden llegar en las próximas horas hasta los 40 grados celsius en zonas meridionales.
La Dirección Meteorológica informó este sábado que la ola de calor se extenderá hasta el próximo miércoles y afectará a 7 de las 16 regiones del país.
Las imágenes recuerdan a la ola de incendios que azotó el sur de Chile en 2017, los más graves hasta ahora y en los que murieron una decena de personas.