Estados Unidos y Reino Unido sancionaron este viernes a varios ex altos funcionarios, oligarcas y empresas de Bulgaria por corrupción y por favorecer a la industria energética de Rusia.

EE.UU. considera que participaron en negocios ilícitos, «erosionaron» las instituciones democráticas búlgaras y «perpetuaron la dependencia energética» que tiene Bulgaria hacia Rusia.

En concreto, el Departamento del Tesoro estadounidense sancionó a Rumen Ovcharov, exministro búlgaro de Energía; a Vladislav Goranov, exministro de Finanzas; a Aleksandar Hristov Nikolov, ex director adjunto de la central nuclear de Kozloduy;¡, y a Iván Genov, ex director general de la misma central, por estar implicados en negocios ilícitos y sobornos.

Como resultado de esas restricciones quedan congelados los activos que puedan tener en EE.UU., mientras que los ciudadanos estadounidenses y sus empresas no podrán hacer negocios con ellos.

Paralelamente, el Departamento de Estado de EE.UU. prohibió la entrada al país a Ovcharov, Nikolov y Goranov.

Otro de los sancionados es Nikolay Malinov, expresidente del partido político Rusófilos por el Renacimiento de la Patria por sobornar a un juez con tal de que le permitiera desplazarse a Rusia a pesar de que lo tenía prohibido por la Justicia.

Dicho partido, así como el Movimiento Nacional Rusófilo y otras dos empresas también recibieron sanciones, puesto que son propiedad o están controladas por el mismo Malinov.

Además, el Reino Unido sancionó por corrupción al oligarca Vassil Kroumov Bojkov, considerado el hombre más rico del país; a Delyan Slavchev Peevski, empresario y exlegislador; y a Ilko Dimitrov Zhelyazkov, exfuncionario de seguridad nacional.