La Secretaría de Economía (SE) informó este viernes que «defenderá» la postura del Gobierno de México en las consultas sobre maíz biotecnológico solicitadas por Estados Unidos.

En un comunicado, la SE indicó que el Gobierno de México recibió este día una solicitud por parte de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR).

Esto para iniciar consultas al amparo del capítulo 31 (solución de controversias) del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), referentes al Decreto del 13 febrero de 2023, en el que se establecen diversas acciones en materia de glifosato y maíz genéticamente modificado.

Según el reporte, la USTR argumentó que «ciertas disposiciones de dicho decreto afectan las importaciones de maíz de Estados Unidos a México».

Ante ello, la SE dijo que, junto con otras dependencias del Gobierno mexicano, demostrará con datos y evidencia que el uso exclusivo de maíz nativo para la masa y la tortilla «no tiene afectación ni interés comercial para Estados Unidos», dado que México «produce el doble de maíz blanco del que destina a la tortilla, nada menos que la base alimentaria de los mexicanos».

Añadió que en la medida en que esta disposición fomenta que México preserve su producción con semillas nativas, «se abona en el cumplimiento del capítulo ambiental del TMEC, en el cual los tres países se comprometieron a cuidar la biodiversidad».

La dependencia mexicana señaló que gracias al nuevo decreto, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) «ha estado en posibilidades de autorizar nuevas semillas de maíz biotecnológico y revaluar negaciones previas».

Además, dijo que «debe remarcarse que el maíz importado de Estados Unidos es complementario y se destina al uso industrial y a la alimentación de animales».

También apuntó que si bien el decreto plantea que la industria y el sector forrajero «transiten de usar maíz genéticamente modificado a maíz no genéticamente modificado, esto no significará restricciones al comercio, como se señala en la solicitud de consultas de USTR».

La SE mexicana dijo que la transición se dará gradual y sosteniblemente, fortaleciendo la competitividad y productividad del campo mexicano en pleno respeto a los compromisos internacionales suscritos por México.

Apuntó que en las consultas que están por iniciar, México ratifica su compromiso de fomentar un diálogo constructivo a través del cual se aclaren las inquietudes de Estados Unidos y se alcance «un acuerdo mutuamente satisfactorio».

Este viernes, Estados Unidos presentó formalmente una solicitud de consultas con México en el marco del T-MEC sobre maíz genéticamente modificado.

El 7 de marzo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se dijo dispuesto a ir a un panel de resolución de controversias para defender que no se importe maíz transgénico para consumo humano.

La controversia surgió el año pasado por la intención del presidente mexicano de vetar las importaciones de maíz transgénico estadounidense para 2024 porque lo considera dañino.

Tras negociaciones, el Gobierno mexicano suspendió la prohibición de importaciones de maíz transgénico para el ganado, pero mantuvo el bloqueo al de consumo humano.