La aviación rusa interceptó este jueves un avión espía RC-135 y dos cazas británicos en el mar Negro, informó el Ministerio de Defensa de Rusia.
Dos cazas Su-27 fueron los encargados de identificar los tres objetivos enemigos -el RC-135 y dos aviones de combate Typhoon- después de que estos fueron localizados por los radares rusos.
Los Su-27 recibieron la orden de despegar para impedir que los aviones de la Fuerza Aérea británica violaran la frontera rusa en el mar Negro, según Defensa.
Tras el acercamiento de los aparatos rusos, el avión de reconocimiento enemigo y los dos cazas que le escoltaban dieron la vuelta.
Como en anteriores ocasiones, Rusia precisó que el comportamiento de su aviación está “en estricta consonancia” con las reglas internacionales del uso del espacio aéreo sobre aguas neutrales, y no incluyó una peligrosa aproximación a los aviones enemigos.
El pasado 6 de octubre un caza ruso MiG-31 interceptó un avión espía estadounidense Poseidon P-8A cerca de la frontera de Rusia sobre el mar de Noruega.
Otro MiG-31 ya había interceptado un Poseidon el pasado 18 de septiembre cuando se acercaba a territorio ruso en el mar de Barents