El príncipe de Gales, William, heredero de la corona británica, reclamó este martes el fin de los combates en Gaza “lo antes posible” y aseguró que ya “han muerto demasiados” en la Franja.

En un inusual pronunciamiento, el hijo mayor del rey Carlos III se mostró “profundamente preocupado” por la situación en Medio Oriente y alertó sobre la “desesperada necesidad de aumentar el apoyo humanitario a Gaza”, así como la importancia de liberar a los rehenes en manos del grupo terrorista Hamas.

“A veces solo es cuando nos enfrentamos a la pura dimensión del sufrimiento humano que se evidencia la importancia de una paz permanente”, dijo William en el comunicado difundido por el Palacio de Kensington, su residencia oficial.

El príncipe realizó esa declaración antes de dos visitas que realizará en las próximas semanas -cuya naturaleza no se ha detallado- para informarse sobre el apoyo humanitario que se brinda a Gaza y la situación de los cooperantes.

William instó a no caer en la desesperación, “incluso en los momentos más sombríos”, y mostró su esperanza en que se encontrará “un futuro más brillante” para la región.

El príncipe de Gales ha asumido en buena medida el rol de representación de la monarquía británica después de que su padre anunciara que sufre un cáncer del que ya está siendo tratado.

Carlos III se refirió en octubre a la “desgarradora pérdida de vidas” en Medio Oriente, poco después de la incursión del grupo terrorista palestino Hamas en Israel, donde mató a miles de personas y secuestró a más de 200.

En un anuncio casi simultáneo al comunicado del príncipe de Gales, el Partido Laborista británico, principal grupo opositor, pidió este martes por primera vez “un alto el fuego humanitario inmediato” en el conflicto en Gaza.

El partido, a quien todas las encuestas sitúan como gran favorito para vencer en las elecciones generales previstas este año, presentó una enmienda a una moción del Partido Nacionalista Escocés (SNP) exigiendo la tregua en el conflicto entre Israel y Hamas.