La policía de Málaga llevó el martes a un «perro robot» a patrullar a modo de prueba por el centro de la ciudad, para alegría de los transeúntes, algunos de los cuales imitaron sus andares toscos o presentaron a sus mascotas el zumbante artilugio con luces parpadeantes en la parte superior.

Diseñado por investigadores de la Universidad de Málaga en los últimos dos años para apoyar la labor policial y detectar infracciones de tráfico, como el uso de patinetes eléctricos en zonas prohibidas, el robot verde y negro de cuatro patas se controla por control remoto por ahora, pero con el tiempo integrará inteligencia artificial para trabajar por su cuenta.

«Lo que destaca en este proyecto es que estamos utilizando tecnología 5G para hacer la teleoperación del robot, para hacer el análisis de imágenes (…) y detectar situaciones de peligro», dijo la investigadora Almudena Díaz.

Durante su debut en la céntrica calle Larios de Málaga, donde se llevó a cabo la primera de las tres pruebas programadas para este año, el robot generó un gran revuelo tanto entre los medios de comunicación como entre los transeúntes, atrayendo la atención como una estrella de cine.

Este robot forma parte del proyecto 5G TACTILE, desarrollado por el Instituto de Tecnología e Ingeniería del Software (ITIS) de la UMA en colaboración con la Unidad de Defensa y Seguridad de Telefónica, responsable de la red 5G desplegada en el centro de Málaga, y la empresa española ALYSIS.

Su función principal es servir como un elemento de apoyo para la policía, con capacidad para grabar y analizar videos en tiempo real, detectar situaciones problemáticas en la vía urbana y alertar sobre emergencias, según explicó Pedro Merino, director del ITIS, a los periodistas.

En términos de movilidad, el robot puede realizar recorridos autónomos por el centro de Málaga, detectar patinetes y emitir mensajes grabados, ya sea para advertir sobre restricciones de acceso o para tranquilizar a las personas sobre la llegada de ayuda. Además, puede realizar diversas acciones físicas como andar hacia adelante y hacia atrás, subir escaleras, sentarse, darse la vuelta y cambiar la dirección de sus patas.

Con un peso de 35 kilos y la posibilidad de añadirle más equipamiento, el robot está equipado con múltiples computadoras para análisis de imágenes, una cámara 360, GPS y tecnología LIDAR para determinar la posición y distancia de objetos. Estas capacidades lo convierten en un elemento versátil y prácticamente indestructible.

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