Al grito de “¡Fuera Layda!”, “¡Fuera Marcela!”, cientos de personas salieron a manifestarse en el malecón de Campeche para exigir la renuncia de la gobernadora Layda Sansores, así como de la titular de la Secretaría y Protección Ciudadana de la entidad, Marcela Muñoz Martínez.
Y es que a pesar de que policías de la dependencia se fueron a paro hace cuatro días tras un motín registrado en el penal de Kobén que dejó más de 30 agentes heridos, la titular de la dependencia no sólo no fue destituida, sino que fue ratificada por la propia gobernadora.
“Marcela Muñoz Martínez es y seguirá siendo la Secretaria de Protección y Seguridad Ciudadana para que no haya confusiones”, dijo Sansores, quien también ha señalado que la protesta en su contra está “motivada” por Movimiento Ciudadano (MC) y el Partido Revolucionario Institucional (PRI), al asegurar que les dan comida a los paristas para “causar inestabilidad política en la entidad”.
La gobernadora ha advertido a los policías que están incurriendo en delitos como motín, sabotaje y usurpación de funciones que pueden llegar a penar con hasta 12 años de cárcel, esto en un intento de acabar con sus protestas. Además, hizo un llamado a que los uniformados regresen a sus funciones este miércoles, garantizando que no tendrían consecuencias.
El penal de Kobén, oficialmente conocido como el Centro de Reinserción Social (CERESO) de Kobén.Este establecimiento se destina a la reclusión de personas que están en proceso de ser juzgadas por diversos delitos o aquellas que ya han sido condenadas.
A lo largo de los años, el penal de Kobén ha enfrentado retos relacionados con la sobrepoblación, las condiciones de vida de los internos y la seguridad, temas que son comunes en muchas prisiones de la región.
Fue el pasado viernes en el penal se encendieron alarmas de seguridad, cuando los presos se amotinaron al iniciar el traslado de algunos personajes considerados de alta peligrosidad.
Agentes policías fueron enviadas al sitio para ayudar a controlar a la población carcelaria, no obstante, fueron golpeadas y agredidas sexualmente por los mismos reos. Además, aseguran que no llevaban equipo adecuado para hacer frente a las agresiones con piedras, botellas y bombas molotov.
Por ello, al día siguiente los policías tomaron la sede de la Secretaría y exigieron el cese de Marcela Muñoz, quien además fue colaboradora de Sansores San Román cuando ésta fue alcaldesa de la Álvaro Obregón en la Ciudad de México.
En videos compartidos a través de las redes sociales se puede ver a la multitud manifestándose pacíficamente, incluso haciendo presencia con las lámparas de sus celulares, para ser vistos y atendidos por las autoridades.
