Tras disputar un encuentro de alta tensión sobre la cancha del estadio Gigante de Arroyito, aficionados de Rosario Central y Peñarol no se guardaron nada y se enfrascaron en una monumental bronca que tuvo un final muy vergonzoso, ya que dentro de la lluvia de golpes e insultos, el defensor uruguayo Maxi Oliveira fue alcanzado por una piedra que lo impactó en el rostro.

El lateral de 32 años terminó con el rostro ensangrentado cuando se dirigía al vestidor. Justo antes de ingresar al túnel, un fanático del equipo argentino lanzó una piedra para contestar los ataques rivales, pero su mala puntería envió el proyectil directo al jugador poco después de finalizar el partido, correspondiente al grupo G de la Copa Libertadores 2024, mismo que ganaron los ‘Rosarinos’ con un económico 1-0.

 

Oliveira fue conducido por sus compañeros a los vestuarios con el rostro ensangrentado, mientras esquivaban otros objetos contundentes lanzados con furia durante el enfrentamiento entre ambas aficiones, mismo que podría traer graves consecuencias a futuro para los dos clubes.

Tras el partido, que dejó a Rosario Central en la cima de la clasificación con los mismos tres puntos de Atlético Mineiro, los jugadores de Peñarol se acercaron a la tribuna baja donde estaban concentrados los hinchas que habían viajado desde Montevideo.

En el mismo sector, aunque en la tribuna superior, los fanáticos de Central se habían dedicado a hostigar a los hinchas de Peñarol, quienes además de la amarga derrota, tomaron la decisión de defenderse sin pensar que la violencia pasaría de las tribunas directamente al terreno de juego.