Agentes policiales y equipos de rescate lograron salvar a un bebé recién nacido que había sido arrojado al fondo de una fosa séptica en una residencia en Izalco, El Salvador.
Según las autoridades, el rescate tuvo lugar en la mañana del martes 23 de abril, después de que los vecinos alertaran sobre la situación del bebé, que no paraba de llorar.
Cuando los policías llegaron al lugar, identificaron rápidamente la ubicación del bebé en la fosa séptica. Uno de los agentes descendió por la fosa utilizando una cuerda y una canasta.
El momento del rescate se hizo viral en las redes sociales, donde se pudo observar a un hombre bajando por el estrecho agujero de la fosa séptica con una linterna en mano. Después de un breve tiempo, el oficial sacó al bebé cubierto de excrementos.
Los equipos de rescate pusieron al bebé a salvo para que recibiera atención médica adecuada.