En un emotivo regreso a sus raíces, Xóchitl Gálvez cerró su campaña presidencial en el pueblo de Tepatepec, donde comenzó su viaje hace más de 40 años. La candidata presidencial, quien ha recorrido un largo camino desde sus humildes inicios, apeló a sus valores y orígenes en el último día de su campaña.
A pocos metros de la casa construida por su abuelo Gabriel Ruiz, Gálvez pidió a familiares y vecinos su bendición y apoyo para las elecciones del próximo 2 de junio. «Vamos a ganar, queridas y queridos paisanos», proclamó Gálvez, destacando que su oponente es un «falso ídolo con pies de barro» que caerá el domingo.
Acompañada por su hija Diana, su hijo Juan Pablo y tres de sus hermanos, Gálvez recordó a las personas que le ayudaron a dejar Tepatepec y construir su vida fuera del pueblo. Vecinos y amigos la observaban desde las azoteas y las calles, llenando el ambiente de apoyo y nostalgia.
Antes de regresar a Tepatepec, Gálvez celebró un cierre de campaña en la Arena Monterrey, donde 17,000 personas se reunieron para mostrar su apoyo. «Los buenos somos más», afirmó, asegurando que la esperanza «ya cambió de manos». Animada por el fervor de sus seguidores, Gálvez ondeó una bandera y afirmó que «Dios está con nosotros».
En su discurso, Gálvez instó a los votantes a acudir a las urnas con alegría el 2 de junio. Recordó sus intentos anteriores de entrar a Palacio Nacional y prometió que abrirá sus puertas para todos los mexicanos. «Hace 11 meses les dije que juntos íbamos a abrir las puertas de Palacio Nacional para todos», recordó.
Durante su cierre de campaña en Monterrey, Gálvez criticó duramente al gobierno de Nuevo León y al partido Movimiento Ciudadano. Sin mencionar nombres, atacó la «identidad naranja» del partido y criticó al gobernador Samuel García por sus acciones. «No, señor gobernador, no me culpe a mí, es usted un corrupto», dijo, alabando a los diputados que frenaron su candidatura presidencial.
Con una campaña marcada por el regreso a sus orígenes y el apoyo masivo de sus seguidores, Xóchitl Gálvez se prepara para enfrentar las elecciones del próximo domingo. «Vamos a abrir las puertas de Palacio Nacional para todos los mexicanos», concluyó, confiada en que su mensaje de esperanza y cambio resonará en todo el país.
El cierre de campaña de Gálvez simboliza un regreso a sus raíces y una promesa de cambio, subrayando la importancia de recordar de dónde venimos mientras miramos hacia un futuro mejor.