La virtual presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, presentó este jueves a seis integrantes de su gabinete −tres mujeres y tres hombres− con los que trabajará para gobernar el país a partir del 1 de octubre. Este primer grupo de nombramientos refleja su compromiso con la paridad de género y la continuidad de la “cuarta transformación” iniciada por Andrés Manuel López Obrador.
Sheinbaum ha confirmado que Rogelio Ramírez de la O, el actual secretario de Hacienda, continuará en su cargo, asegurando la estabilidad en la gestión económica del país. Durante su campaña, Sheinbaum prometió que su gabinete tendría una representación equitativa de género, esperando que al menos 10 de las 19 secretarías de Estado estén encabezadas por mujeres.
El resto del gabinete de Sheinbaum se prevé estará conformado por excolaboradores de su administración en el Gobierno de la Ciudad de México y funcionarios cercanos a López Obrador, consolidando así una base de confianza y experiencia compartida. Este enfoque busca avanzar en el “segundo piso de la cuarta transformación”, una continuidad de las políticas y reformas impulsadas por el actual presidente.
– Secretaría de Economía (SE): Marcelo Ebrard.
– Secretaría de Ciencia, Humanidad, Tecnología e Innovación Educación Pública (nueva dependencia): Rosaura Ruiz Gutiérrez.
-Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE): Juan Ramón de la Fuente.
-Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat): Alicia Bárcena Ibarra.
– Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural: Julio Berdegué Sacristán.
– Consejería Jurídica de Presidencia: Ernestina Godoy.
En cuanto a las políticas de su próxima administración, Sheinbaum ha delineado varias prioridades, conocidas como el “Plan C”, enfocadas en dar apoyo económico a las mujeres de 60 a 64 años, implementar becas universales para estudiantes de educación básica, realizar cambios a la Ley del ISSSTE de 2007, y mantener la no reelección. Además, dos de las reformas prioritarias están alineadas con las propuestas de López Obrador presentadas en febrero: la reforma al Poder Judicial y el reconocimiento de los pueblos indígenas y afromexicanos como sujetos de derecho.
Juan Ramón de la Fuente, encargado del equipo de transición de Sheinbaum, afirmó que el proceso de transición con López Obrador se realizará sin rupturas pero con independencia. De la Fuente subrayó que aunque existe una afinidad ideológica y una continuidad en valores y principios, Sheinbaum no será una «calca» del gobierno de López Obrador, y hará los ajustes necesarios en áreas donde no se lograron los objetivos.
“Sí, hay afinidad ideológica, por supuesto, vienen del mismo movimiento, pero hay diferencias fundamentales en la personalidad, en el estilo, incluso hay diferencias en las prioridades. Lo que sí está muy claro es que no queremos entrar en una ruptura y en una confrontación”, señaló De la Fuente.
Sheinbaum busca mantener una relación de diálogo y cooperación con diversos sectores del país, incluyendo el sector empresarial, para garantizar una administración efectiva y en sintonía con las necesidades y expectativas de la población mexicana.