Marko Cortés respondió mencionando los malos resultados electorales de 2012, cuando Calderón era presidente y el PAN quedó en tercer lugar en las elecciones presidenciales con Josefina Vázquez Mota como candidata.
Además, Cortés pidió explicaciones sobre la situación de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad de Calderón, acusado de narcotráfico en Estados Unidos, insinuando que Calderón no estaba al tanto de lo que sucedía en su propio gobierno o lo consentía.
La pelea se intensificó con acusaciones mutuas sobre la debacle del PAN. Calderón señaló que Cortés se había servido del partido y no cubrió adecuadamente los representantes de casilla, mientras que Cortés acusó a Calderón de pactar la Presidencia en 2012 con el priista Enrique Peña Nieto, dejando sola a la candidata panista Vázquez Mota.
Esta disputa ocurre en un momento crítico para el PAN, en medio del proceso de renovación de su dirigencia, y refleja las profundas divisiones dentro del partido sobre su dirección y liderazgo.
