Tras una reunión con los padres de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, Vidulfo Rosales, abogado y representante legal de la mayoría de los familiares, afirmó que el presidente Andrés Manuel López Obrador les comunicó que los restos óseos analizados por la Fiscalía General de la República (FGR) no pertenecen a los desaparecidos.

Durante la reunión con el presidente, se informó a los padres que los restos que habían estado bajo custodia de la Fiscalía de Guerrero desde 2015 no corresponden a los 43 estudiantes, ya que las pruebas realizadas arrojaron resultados negativos. Por lo tanto, no es posible proceder con la identificación de los cadáveres.

Además, se pospuso la presentación del informe que el mandatario planeaba entregarles y se acordó una nueva reunión para el 29 de julio con la presidenta electa.

Rosales, quien forma parte del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, destacó que aunque los restos no coinciden con los jóvenes desaparecidos desde octubre de 2014, los familiares habían rechazado previamente estos análisis debido a que la Fiscalía General de la República no cumplió con los protocolos acordados ni tomó en cuenta la opinión del equipo argentino de Antropología Forense.

Anteriormente, los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa habían denunciado que la FGR estaba llevando a cabo análisis sin la capacitación técnica adecuada y sin contar con sus propios peritos. También señalaron que no se envió una muestra al laboratorio de genética de la Universidad de Innsbruck en Austria y que se empleó una técnica para obtener ADN mitocondrial con una certeza limitada.

Es relevante recordar que inicialmente los restos fueron enviados a laboratorios especializados como el Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Innsbruck y al laboratorio del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF).