El nadador mexicano Miguel de Lara vivió una jornada agridulce en la París La Defense Arena durante la competición de 100 metros pecho en los Juegos Olímpicos de 2024.

Tras una destacada actuación en su heat eliminatorio, donde quedó cerca del islandés Anton McKee, líder de la segunda serie y quien registró el mejor tiempo de la ronda, De Lara recibió la noticia inesperada de su descalificación.

Durante la competencia, el mexicano mostró un rendimiento prometedor, situándose en una posición competitiva que le daba esperanzas de avanzar a la siguiente ronda. Sin embargo, mientras saludaba a sus competidores y esperaba los resultados finales, el mexicano fue informado de que había sido descalificado.

María José Alcalá, presidenta del Comité Olímpico Mexicano, explicó en una entrevista con ESPN los detalles detrás de la descalificación: «El problema surgió debido a una patada que no cumplió con las reglas de la prueba. Aunque Miguel nadó con un buen tiempo, se le sancionó por realizar una patada diferente a la estipulada para el estilo pecho, parecida a una patada de delfín o mariposa, lo cual fue registrado y revisado bajo el agua.»

La descalificación del nadador mexicano significó la pérdida de su oportunidad de avanzar a la siguiente ronda y de luchar por una medalla en los 100 metros pecho. A pesar del contratiempo, la presidenta del Comité Olímpico Mexicano elogió el esfuerzo del nadador, destacando su desempeño en la prueba.

Con la mirada puesta en el futuro, Miguel de Lara se prepara ahora para su próxima competencia, los 200 metros pecho, que se llevará a cabo el 30 de julio de 2024. La preparación y el apoyo de sus seguidores serán cruciales para enfrentar este nuevo desafío y continuar con su participación en los Juegos Olímpicos.