El gobierno mexicano ha expresado una condena firme y enérgica contra un reciente ataque en los Altos del Golán, atribuido al grupo chií libanés Hizbulá, que resultó en la trágica muerte de 12 menores en la localidad drusa de Majdal Shams. El ataque del sábado ha sido calificado por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México como una acción deplorable que demanda una respuesta de prudencia y desescalamiento en la región.

La Secretaría de Relaciones Exteriores de México ha emitido un comunicado en sus redes sociales en el que condena enérgicamente el ataque que ha dejado varios civiles muertos, incluyendo menores de edad. En su mensaje, la SRE subraya la necesidad urgente de reducir la violencia en Gaza y en toda la región circundante para facilitar un cese al fuego y avanzar hacia negociaciones de paz.

 

El grupo Hizbulá, conocido por su papel activo en el conflicto en la región, ha reivindicado varios ataques recientes en el área del Golán. Sin embargo, el grupo ha negado cualquier responsabilidad en el ataque específico que causó la muerte de los menores en Majdal Shams. La situación en los Altos del Golán ha generado preocupación a nivel internacional debido a la compleja historia y la tensa situación geopolítica de la región.

Los Altos del Golán, una región de alta importancia estratégica, fueron ocupados por Israel durante la Guerra de los Seis Días en 1967 y anexionados de manera unilateral en 1981. Esta acción no ha sido reconocida por la comunidad internacional, y la soberanía de la región sigue siendo un punto de conflicto entre Israel y Siria.

El ataque del sábado llega en un momento de creciente tensión en la frontera entre Israel y Líbano, que ha alcanzado su nivel más alto desde 2006. Desde el 8 de octubre, un día después del inicio del conflicto en la Franja de Gaza, se ha producido un intenso intercambio de fuego entre ambas naciones, exacerbando aún más la inestabilidad en la región.

La situación en Gaza también ha influido en el aumento de las hostilidades, con una escalada de violencia que ha afectado a varias áreas vecinas y ha desencadenado una serie de ataques y represalias. La comunidad internacional ha llamado a la calma y a la moderación para evitar una mayor pérdida de vidas y daños colaterales.

En este contexto, la condena de México subraya la necesidad urgente de esfuerzos conjuntos para restaurar la paz y la estabilidad en una región que ha estado marcada por décadas de conflicto y enfrentamientos. La comunidad global enfrenta el desafío de encontrar una solución duradera que pueda abordar las causas subyacentes del conflicto y promover una coexistencia pacífica entre las diversas naciones y comunidades en la región.