El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, ha anunciado un reforzamiento de la vigilancia en la frontera con Chiapas, México, debido a la entrada de cientos de mexicanos que huyen de la violencia generada por grupos del crimen organizado.
Durante una rueda de prensa, Arévalo explicó que están trabajando junto con el Ministerio de la Defensa y la Policía Nacional Civil para prevenir que la violencia se extienda al territorio guatemalteco. El mandatario enfatizó que este refuerzo tiene como objetivo garantizar la seguridad de los guatemaltecos y evitar que los problemas existentes en México puedan afectar a su país.
Desde el 23 de julio, numerosos ciudadanos han cruzado a Guatemala en busca de seguridad, siendo 207 de ellos beneficiados con un permiso humanitario de permanencia.
Los 207 mexicanos que recibieron un permiso humanitario de residencia por 30 días se encuentran en el municipio de Cuilco, donde reciben asistencia. Arévalo también mencionó que ambos países están coordinando esfuerzos para ofrecer la atención humanitaria necesaria a los refugiados y facilitar su retorno seguro a México si así lo desean.
Según el análisis del centro Insight Crime, los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación están en conflicto por el control de diversas localidades fronterizas, vitales para el tráfico de drogas, armas y migrantes que transitan por México hacia Estados Unidos.
El 3 de agosto, Guatemala y México acordaron llevar a cabo operaciones conjuntas de seguridad en la frontera, mantener mecanismos de comunicación y convocar a una reunión del Grupo de Alto Nivel de Seguridad México-Guatemala a finales de agosto, presidida por los ministros de Gobernación de ambas naciones.