El empresario Mark Zuckerberg ha vuelto a sorprender al mundo, esta vez con un regalo fuera de lo común para su esposa, Priscilla Chan. El fundador de Meta (antes conocido como Facebook) decidió encargar una estatua colosal de su cónyuge, realizada por uno de los artistas más demandados del momento. Según comentó Zuckerberg, hacía tiempo que tenía la intención de realizar este particular obsequio.

El pasado martes 13 de agosto, Zuckerberg compartió en su cuenta de Instagram una publicación en la que se ve a Chan, de 39 años, junto al imponente regalo. «Recuperando la tradición romana de hacer esculturas de tu esposa», escribió el magnate en tono humorístico.

La estatua, que según se puede apreciar en la fotografía y el video compartidos, mide más de dos metros, es una representación artística de Chan. La obra destaca por la sensación de movimiento que transmite, con el cuerpo de la mujer en una posición dinámica y una prenda plateada que parece ser llevada por el viento hasta transformarse en unas alas. En la imagen, Chan posa con una bata mientras sostiene una taza.

Zuckerberg y Chan se conocieron hace más de 20 años, en 2003, cuando ambos estudiaban en la Universidad de Harvard, y se casaron en 2012. La pareja tiene tres hijas: Maxima, August y Aurelia, nombres que sugieren un gusto compartido por la tradición romana, algo que evidentemente va más allá de las esculturas.

La estatua fue creada por el renombrado artista estadounidense Daniel Arsham, conocido por su uso de colores turquesa y detalles plateados en sus esculturas, las cuales a menudo realiza en materiales como cristal, ceniza volcánica y bronce fundido. Actualmente, Arsham tiene una exhibición en Venecia, en la iglesia Chiesa di Santa Caterina. Aunque no se han dado detalles específicos sobre la creación de la estatua de Chan, parece estar inspirada en la icónica Victoria alada de Samotracia, una escultura que se encuentra en el Museo del Louvre, en Francia, y que representa a la diosa de la victoria, Niké.

Zuckerberg explicó que con esta obra cumplió dos deseos: por un lado, bromeaba desde hace años con la idea de hacer una estatua de su esposa; por otro, quería tener una obra exclusiva de Arsham.

La publicación de Zuckerberg reunió en poco más de 24 horas más de 200 mil “me gusta” y casi 5000 comentarios. Las reacciones fueron diversas: algunos usuarios calificaron el gesto como “épico” y “espectacular”, mientras que otros lo consideraron excesivo, comentando que «esto es lo más multimillonario que ha hecho jamás». Otros aprovecharon la oportunidad para bromear: “Estaba a punto de conseguirle lo mismo a mi esposa. Ahora tengo que hacer un cambio”.

 

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