El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha enviado una nota diplomática de protesta al gobierno de Estados Unidos en respuesta a las recientes declaraciones del embajador Ken Salazar sobre la reforma al Poder Judicial en México. López Obrador expresó que el país no aceptará injerencias de representantes de gobiernos extranjeros en asuntos que corresponden exclusivamente a los mexicanos.

En una conferencia de prensa, el presidente López Obrador subrayó la relación de respeto entre México y Estados Unidos, pero también indicó que recientes actos, como las declaraciones del embajador Salazar, han puesto a prueba esta relación. Salazar había advertido sobre los riesgos de la reforma judicial propuesta, que incluye la elección directa de jueces y magistrados, señalando que esto podría afectar la relación comercial entre ambos países y permitir la intervención de cárteles de drogas.

El embajador estadounidense expresó su preocupación por cómo esta reforma podría impactar la confianza de los inversionistas en el marco legal de México, lo que a su vez podría amenazar la histórica relación comercial entre los dos países.

López Obrador mostró su extrañeza ante estas declaraciones y las atribuyó a una política injerencista histórica de Estados Unidos. Recordó que, a pesar de las diferencias y tensiones pasadas, como el discurso beligerante del expresidente Donald Trump contra los migrantes, México logró mantener relaciones respetuosas y hasta firmar un tratado comercial. Aseguró que durante la administración del presidente Joe Biden, la relación se mantuvo basada en el respeto mutuo, con un compromiso de igualdad en la relación bilateral.